Paisaje y gastronomía gallegos se exhiben en la gala de presentación de la cita
19 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Ourense Termal ? Madrid. Más clara, solo el agua. La definición es concisa y la única provincia gallega de interior alardea de su principal riqueza, de su valor más exportable, para cobijar el inicio de la 71 Vuelta Ciclista a España, esa que resumimos como La Vuelta 2016. El Balneario de Arnoia y sus lujosas vistas al río fueron el escenario idóneo para la puesta de largo de una batalla deportiva de auténtico relumbrón, en la que no faltarán primeros espadas de la bicicleta como Chris Froome, Alberto Contador, Alejandro Valverde, Nairo Quintana, Tejay Van Garderen, Robert Gesink o Samuel Sánchez, por citar algunos ejemplos.
Fue una primera escena en la que el público ourensano ya mostró su calor a las estrellas del ciclismo en ruta y en la que Galicia también lució sus encantos, los de aquí y, desde una pantalla gigante, los del resto de la comunidad en la que permanecerá la carrera hasta el próximo día 26.
Y a esa exhibición paisajística de la presentación se unió además otro de los fuertes de Galicia como atractivo turístico, el gastronómico.
La cocina como reclamo que aportaron las brillantes firmas del grupo Nove y Amigos da Cociña Galega, desde Pepe Solla a Yayo Daporta, pasando por Xan Crujeiras, Iñaki Bretal, Eduardo Pardo o Lucía Freitas, entre otros muchos que compartieron recinto natural a la sombra de los árboles con los productos con denominación de origen y otro tipo de distintivos de calidad que abundan en Galicia.
Fue la guinda a la gala que tuvo como maestros de ceremonia a Perico Delgado y Carlos De Andrés, ante un público ávido de escuchar en directo las palabras de un tricampeón del Tour como Froome o la declaración de intenciones de un Alberto Contador que pasa de especulaciones sobre quién se ha preparado mejor o peor. Y todo con el toque musical de una gallega emigrada como Marta Sánchez y su banda sonora de la ronda ciclista: El ganador.
En suma, La Vuelta está lanzada. Parte de Ourense y pretende llevar a toda España una seña de identidad intransferible. Toca abrir una ventana al mundo, a través del deporte.
El termalismo deportivo se convierte en nueva bandera de Ourense
El alcalde de Arnoia, Rodrigo Aparicio, fue el encargado de abrir una gala en la que el municipio se unió a la estrategia provincial de aludir a lo que califican como «termalismo deportivo», a modo de motor de desarrollo económico. Con el olimpismo todavía a flor de piel y las medallas del piragüismo sobre la mesa, en las alocuciones no faltaban los recuerdos a la vinculación ourensana con internacionales de remo, los palistas y ahora con una de las grandes citas del panorama deportivo internacional, La Vuelta, que retorna a la geografía provincial dos años después y con multiplicada repercusión.
A un nivel más global, la directora de Turismo de Galicia, Nava Castro, recordó aquella batea que hizo historia a nivel visual en las retransmisiones televisivas de la prueba, recordando además la importancia de Ourense en el mapa vitivinícola de Galicia, con cuatro de las cinco Denominaciones de Origen y con una excelencia en cuanto a termalismo que llamará la atención de mucho potenciales visitantes.
En medio de toda esa proyección de Galicia -y en especial de Ourense- hacia el exterior, La Vuelta, ese bebé que ha mimado Unipublic durante los últimos años, alardeó de credenciales, poniendo sobre el escenario a veintidós equipos del más alto nivel, con gigantes del calado de Sky, Tinkoff o Movistar, que además acuden con sus principales figuras, para asegurar ese tufillo de cita ineludible entre las grandes del deporte mundial.
En pleno Ribeiro, la ronda hispana cobrará una imagen que la hace particular. Lo aseguró satisfecho Javier Guillén, que subió con José Manuel Baltar para mostrarse esperanzado de que otra salida gallega de la carrera contribuirá a que siga creciendo.