El Concello de Ourense, al ralentí durante la huelga de sus funcionarios por el hartazgo con Jácome
OURENSE
Los trabajadores cifran en un 90 % el seguimiento de la huelga en el Concello de Ourense. El gobierno municipal no da información sobre el impacto del paro, que cerró la oficina del Registro y redujo al mínimo la actividad en otros departamentos
31 oct 2024 . Actualizado a las 21:24 h.Este jueves a mediodía en la praza Maior de Ourense, con las banderas a media hasta en señal de luto por las víctimas de la dana en el Levante, convivieron los preparativos de las actividades programadas para celebrar Halloween con una movilización de los trabajadores del Ayuntamiento. Estos celebraron allí una concentración silenciosa con motivo de la primera de las dos jornadas de huelga convocadas para protestar por la política de personal del gobierno encabezado por Gonzalo Pérez Jácome. Los representantes de los trabajadores cifran el seguimiento del paro en un 90 % y el ejecutivo municipal no ofrece por ahora ningún tipo de información al respecto.
Tal y como estaba previsto, la oficina del Registro, situada en la rúa da Barreira, junto a la praza Maior, estuvo cerrada. Quienes acudían allí para trámites urgentes de empadronamiento eran derivados a otras dependencias, en la praza de San Martiño, donde había una funcionaria de servicios mínimos. Los ciudadanos que hacían cola lamentaban la confusión, pero se mostraban resignados por la espera.
En el resto de oficinas municipales la actividad era mínima, con un solo trabajador para la atención al público. En la puerta de algunas de esas dependencias los huelguistas colocaron carteles que advertían: «Pechado por folga». Según los representantes de los trabajadores, se están respetando los servicios mínimos decretados por el alcalde, también en los cementerios, donde estaban convocados un 50 % de los trabajadores.
En días previos, Jácome había acusado a los sindicatos de querer tener cerrados los camposantos en una fecha clave como la de este jueves, víspera de la festividad de Todos los Santos. Los trabajadores lo negaron desde el primer momento y, efectivamente, los cementerios municipales de San Francisco, Santa Mariña y As Caldas abrieron hoy con normalidad y cientos de ourensanos pudieron visitarlos para preparar las tumbas de sus allegados.
Lo subrayó ante los medios de comunicación el presidente de la junta de personal, Javier Nóvoa, tras la concentración silenciosa celebrada este mediodía en la Praza Maior, encabezada como en días previos por una pancarta que reclama «Concello solución». También se mostraron otros carteles, como uno que pedía «una moción de censura para este caradura», en alusión a un posible acuerdo para relevar a Jácome que exigiría la intervención de PP, PSOE y BNG. Representantes de esas tres formaciones asistieron a la movilización de este jueves.
Inicialmente se había convocado una manifestación, pero los representantes de los trabajadores decidieron suspenderla y celebrar una concentración silenciosa en señal de duelo por las víctimas de la dana. Además, repartieron entre los asistentes lazos negros y el presidente de la junta de personal, Javier Nóvoa, subrayó que haber actuado de otro modo habría sido una «falla de respecto e de solidariedade con todo o que está sucedendo». No quiso valorar el hecho de que el Concello mantenga sin cambios el programa de Halloween, pero recordó que los representantes de los trabajadores ya se habían opuesto al 50 % de servicios mínimos decretado por Jácome para garantizar la celebración de esas actividades, que tienen como plato fuerte la actuación esta noche de la Orquesta Panorama.
Sea como sea, el presidente de la junta de personal se mostró satisfecho con el seguimiento de la huelga, que cifró en un 90 %. «A asistencia á folga foi masiva e a verdade é que estamos moi contentos», dijo Javier Nóvoa, que también destacó que los paros se desarrollaron sin ningún tipo de incidente. Aprovechó, además, para recordar sus quejas, entre las que están impagos «recurrentes» de horas extras y pluses, la modificación del proceso de estabilización de personal o las «presións e acosos» del gobierno de Jácome. «Creo incluso que chegamos tarde con esta folga. A degradación institucional é evidente», dijo.
Los representantes de los trabajadores reclaman negociación, pero desde que convocaron la huelga el gobierno municipal no ha hecho ningún tipo de acercamiento para escuchar sus reivindicaciones. En estas circunstancias la junta de personal mantiene el paro convocado para el día 4 y ya está estudiando ampliar la huelga, tal y como confirmó Nóvoa.
Este jueves, mientras los trabajadores aún estaban concentrados en la praza Maior, Jácome salió de la Casa do Concello acompañado de varios miembros de su equipo mientras los manifestantes lo increpaban y abucheaban. El alcalde los miró mientras seguía caminando y se marchó.
El Concello de Ourense no ha respondido a las consultas de este periódico sobre el seguimiento de la huelga y ni el regidor ni su partido, Democracia Ourensana, han reaccionado de ningún modo en las redes sociales, su principal vía de comunicación. Sus perfiles se limitaron a anunciar las actividades de Halloween y a defender su celebración, criticada por el PP, que entiende que deberían suspenderse por el luto oficial en homenaje a las víctimas de la dana.
Urbanos de Ourense
Por otra parte, en la concentración de este jueves también participaron un grupo de trabajadores de la empresa concesionaria del servicio de transporte, Urbanos de Ourense. Según denuncian, las negociaciones del nuevo convenio colectivo se han roto y culpan de ello al gobierno municipal por sacar a licitación justo ahora el contrato, que lleva en precario desde el año 2015.