El paso de Concha Velasco por Ourense: colas para verla en el teatro y aplausos en el festival de cine

Se dio a conocer en la gran pantalla como una voluntaria de la Cruz Roja y se consagró como chica ye-yé. Tuvo un romance cinematográfico con un afilador de Lugo -cosas del guion- encarnado por Fernando Fernán Gómez en Los gallos de la madrugada, película dirigida por ese amor imposible llamado José Luis Sáenz de Heredia, y rodó unos cuantos títulos en Galicia. Y su paso por Ourense era recordado hace un par de años cuando el OUFF homenajeó a Berlanga con motivo del centenario de su nacimiento. Sucedió en el año 2005 y una de las presencias estelares de aquel año fue, sin lugar a dudas, la de Concha Velasco. En el Teatro Principal se desarrolló el reconocimiento a Berlanga. El director entró acompañado por la actriz y fueron recibidos con una calurosa ovación de las que marcan época. Participaba también en la iniciativa Álex de la Iglesia, al que algunos señalaban entonces como el sucesor natural del homenajeado. Precisamente con Luis García Berlanga trabajó Concha Velasco en la última película del director: París-Tombuctú (1999). En el OUFF 2021 Nora Sola y César Silva, los responsables del Festival de Cine Internacional de Ourense cuando se contó con la presencia del director y la actriz en el 2005, recordaban la cercanía, generosidad y empatía de los invitados de aquella convocatoria.

Regresaría al año siguiente la actriz vallisoletana, que falleció este fin de semana, con una de sus míticas obras de teatro: Filomena Marturano. Un personaje que le había dado muchas satisfacciones en el año 1979 y al que se enfrentaba de nuevo, por iniciativa propia. En una entrevista realizada por Fina Ulloa reconocía que había sido una imposición suya volver a meterse en la piel de la protagonista de la obra de Eduardo de Filippo. «No sabes lo que ha supuesto para mí volver a interpretar a un personaje que me ha dado tantas satisfacciones», señalaba. También establecía un paralelismo con la misma: «Filomena tiene muchos puntos de contacto con Conchita. Porque es una mujer que defiende la familia que no ha podido tener y yo, en definitiva, sí la he tenido, pero al final se me ha dado mal conservarla». También reconocía estar «un poco escamada» con la televisión en aquellos tiempos, situación cuyo origen situaba en su equivocación al aceptar algunas propuestas.

Acceda aquí a la entrevista publicada en el 2006

La devoción de los ourensanos por la que fue una de las grandes damas del teatro de las últimas décadas -con una carrera profesional en la escena, el cine y la televisión que se desarrolló a lo largo de más de seis décadas- era un hecho innegable, como se demostró cuando unos años antes había pasado por el escenario del Principal con Las manzanas del viernes, obra creada a partir de un texto de Antonio Gala. La actividad formaba parte de la programación de Caixanova y las dos sesiones programadas no fueron suficientes para dar respuesta a la demanda de entradas. Cuando se pusieron a la venta, la cola para comprarlas llegaba desde la taquilla del Principal hasta la puerta del Café Latino. Una circunstancia que se trasladaba a la presentación de la programación de la siguiente temporada. En la firma del convenio entre Caixanova, Diputación de Ourense y Concello para presentar la programación del primer semestre del año 2001 el regidor municipal, Manuel Cabezas, apuntaba que se hacía urgente y necesario contar con un auditorio en la ciudad. El mismo serviría para dar respuesta «cuando se generan demandas importantes, como la registrada con la actuación de Concha Velasco», señalaba.

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