Alquiló un piso completamente equipado en Verín y al dejarlo se llevó los radiadores de cuatro habitaciones
OURENSE

La investigada ha sido condenada a nueve meses de cárcel por un delito de apropiación indebida
30 oct 2023 . Actualizado a las 22:16 h.No hay dudas de que el piso que una mujer alquiló en Verín durante un año estaba totalmente amueblado y equipado con radiadores en todas las habitaciones. Tampoco de que cuando la inquilina dejó la vivienda esas estufas ya no estaban, y es por ello que la arrendataria acaba de ser condenada. La mujer, que ni siquiera se personó al juicio en su contra celebrado en Ourense hace algunas semanas, tendrá que afrontar una condena de nueve meses de cárcel por un delito de apropiación indebida, quedando además obligada a pagar el precio que costaron los aparatos.
El incidente se remonta al mes de junio del 2021. La acusada, de 38 años, llevaba un año residiendo en un piso de alquiler situado en el centro de Verín cuando avisó de que dejaba la vivienda. Comunicó esta decisión a la trabajadora de una agencia inmobiliaria, la misma que doce meses antes le había enseñado la casa y había redactado el contrato de alquiler, y a pesar de que ambas pactaron día y hora para verse y que la inquilina le entregara las llaves, en el último momento esta avisó de que se tenía que marchar y que dejaría las llaves en el buzón. Cuando la profesional de la agencia acudió a revisar el piso, ya se dio cuenta de que faltaban los radiadores de calor azul de las cuatro estancias de la casa. Avisó enseguida al propietario y este acudió al cuartel de la Guardia Civil a denunciar los hechos, por los que ahora ya hay sentencia.
«Entendemos que la conducta desarrollada por la acusada es constitutiva de un delito de apropiación indebida», sostiene la magistrada del Juzgado de lo Penal 1 de Ourense. Da por hecho, en el fallo, que la vivienda estaba equipada con los aparatos de calefacción, ya que así lo aseguraron tanto el dueño como la agente inmobiliaria, aportándose además las facturas de compra. También quedó acreditado que faltaron el mismo día que la acusada abandonó la vivienda, por lo que no se le puede atribuir a nadie más que ella su desaparición. La jueza tilda de «contundente» esta prueba, pero es que además reprocha a la acusada que no acudiera al juicio para contar su versión de los hechos ni presentara más alegato, en su primera declaración tras la denuncia, que decir que ella había comprado sus propios calefactores cuando se fue a vivir al piso. «Eso no significa que el inmueble no contase con los cuatro radiadores», advierte la togada.
La sentencia, sobre la que cabe presentar recurso ante la Audiencia Provincial de Ourense, establece que la mujer pague al denunciante los 1.355 euros que costaban los aparatos.