Lágrimas en A Arnoia por Mitogo, el futbolista localizado en el río Miño

OURENSE

La camiseta con el once de Mitogo acentuó su recuerdo en la misa de funeral
La camiseta con el once de Mitogo acentuó su recuerdo en la misa de funeral Santi M. Amil

El fútbol gallego despidió en la iglesia de San Salvador al jugador, cuyo cadáver fue encontrado tras una intensa búsqueda que duró trece días

03 jun 2023 . Actualizado a las 19:52 h.

Los restos mortales de David Edu García Mitogo descansan en paz en El Bierzo desde hace unos días, pero faltaba la despedida íntima en uno de los enclaves del mapa balompédico gallego. En una de esas plazas en las que el futbolista fue feliz. La directiva del Atlético Arnoia convocó una misa de funeral en la iglesia de San Salvador, una de esas estaciones obligadas para los amantes de las huellas del Románico en O Ribeiro.

Muchos de los personajes vinculados al club de A Queixeira, incluido el alcalde Rodrigo Aparicio, oficiaron de anfitriones para la propia familia del fallecido y para representantes de la federación gallega y de otros equipos, tanto los que disfrutaron de la pericia de Mitogo sobre los terrenos de juego como de quienes lo tuvieron enfrente y, aún así, cultivaron cierto lazo de amistad.

La mayoría, eso sí, la representaron a los que compartieron con él esa última etapa en A Arnoia. Fue una eucaristía, un acto religioso, pero también un adiós, por no decir un hasta siempre, como quedó de manifiesto en los dos parlamentos que se unieron al acto religioso en su colofón. Como sucedió antes —durante los trece días de angustiosa búsqueda del delantero y hasta la aparición de su cadáver en aguas del río Avia—, aquellos que habían compartido con él escenas cotidianas destacaban su cercanía y su conexión con las demás personas, lo mismo en los recintos deportivos que con sus familiares y amigos.

No todos se enfrentan igual al duelo, pero después de algo más de media hora, contemplando la camiseta con el número 11 del Arnoia y una fotografía de Mitogo vistiéndola, las lágrimas predominaron al final de la emotiva despedida.

El que fuera promesa de la Deportiva Ponferradina, llegó de Guinea a aquellas latitudes para crecer pegado a un balón, para disfrutar con él dentro del área, donde los demás se ponían nervioso. El mundo del balompié nunca es sencillo y una lesión de rodilla, además de la falta de fortuna en más de un momento determinante dificultó su carrera al estrellato, pero terminó por construir una sólida carrera en categorías como la Tercera División, sobre todo. Nombres como los del Compostela y Unionistas de Salamanca hablan del caché de joven con muchos argumentos deportivos, que en todo caso, encontró una segunda casa en la provincia de Ourense.

El Centro de Deportes Barco y el Club Deportivo Arenteiro fueron entidades que lo tuvieron en sus filas y el Atlético Arnoia lo reclutó para la Preferente. A muchos de esos compañeros de fatigas se les encogió el alma ayer, mientras abrazaban a sus familiares. Es lo que tiene el adiós. Ahora toca recordar los buenos momentos.