Borja Atanes detuvo un penalti y frenó varios ataques pucelanos en una vistosa eliminatoria de Copa del Rey
12 nov 2022 . Actualizado a las 19:39 h.Lo sabían en el Barbadás. Tocaba disfrutar de una auténtica fiesta del fútbol, recibiendo a un equipo de Primera División como el Real Valladolid. El equipo de Preferente se vio arropado por más de 3.000 espectadores en O Couto y, por si fuera poco, mantuvo un alto nivel de competitividad frente a un rival superior, que se conformó con cubrir su expediente: 0-2. Fin del estreno en la Copa del Rey y sensación de deber cumplido. Termina un sueño y toca forjar otros.
La puesta en escena de ambos conjuntos mezclaba la ilusión y cierto tembleque en las piernas de los azulones, con la intimidante presión alta de los hombres de Pacheta, que forzaban su primera oportunidad sin que transcurriera el minuto inicial, en un chut de Kike Pérez que desvió Borja. Tampoco tardaron mucho en soltarse los de casa, con su capitán Toño asociándose a Gabri, tras una diagonal del carrilero. En este caso, la defensa no dejó fisuras.
Uno y otro conjunto asumían sus roles en un duelo tan desigual que saltaba cinco categorías y en ese guion establecido, los más inconformistas son siempre los goleadores. El canterano de los albivioletas, Diego Moreno, progresó hasta la línea de fondo por el carril zurdo y su centro lo cazó Diego León pese a que Marcelo metió el pie para dificultar su remate. El máximo artillero de los vallisoletanos en La Liga, también acudió a la llamada de la Copa.
El resultado era lo de menos para el voluntarioso elenco de Agustín Ruiz, que siguió a lo suyo, competir con dignidad y divertirse con su premio. La pugna cobró mayor colorido a medida que los anfitriones enlazaban alguna combinación sobre el césped. Eso sí, lo de acercarse a los dominios de Jordi Masip era más complicado.
Mediado ese primer tiempo, León firmó otro remate que se le fue flojo y Borja sacó a córner un libre directo de Monchu. Camino del descanso, el meta local frenó a un Aguado que lo encaró solo, pero intentó apoyarse en un compañero. En la siguiente incursión castellana, Gómez Fuertes sancionó una falta al borde del área. Se la pidió enseguida Sergio León y el cordobés la embocó salvando la barrera por dentro y sorprendiendo al portero. No quedó tiempo para más que una acción individual de Rivero, que no cogió portería por poco, entre el jolgorio de la grada.
La segunda mitad siguió ceñida a los cánones. Mayor control del once de Pucela y el tesón encomiable de los azules. En las áreas, poca cosa, hasta que la zaga visitante rechazó dos remates Isma y Xinzo envió alto el tercero. El estadio se caía, porque la entrada del ariete incomodaba más a su oponente. Kike Pérez era el más inquieto en la otra portería, pero el penalti que lanzó por una mano dentro del área lo repelió Borja Atanes, agigantando su figura en el enfrentamiento. El público vibraba con su equipo, que mantenía la figura erguida hasta el pitido final. No hubo sorpresa mayúscula, pero la Copa moló mucho en Barbadás.
UD BARBADÁS (0): Borja, Gabri, Ribao, Marcelo, Ocampo (Manu Blanco, min 79), Nespe, Bass (Parrilla, min 50), Toño (Caneiro, min 70) , Rivero, Isma (Cheri, min 79) y José Ramón (Xinzo, min 50).
REAL VALLADOLID (2): Masip, Lucas Rosa (Fresneda, min 46), Joaquín, David Torres, Diego Moreno (Arroyo, min 86), Aguado (Óscar Plano, min 46), Monchu, Roque Mesa, Kike, Narváez y Sergio León.
GOLES: 0-1, min 12: Sergio León; 0-2, min 38: Sergio León, de libre directo.
ÁRBITRO: González Fuertes, del comité asturiano.
INCIDENCIAS: Espectacular ambiente en O Couto para el choque de la primera ronda de la Copa del Rey. Unos 3.000 espectadores en las gradas.