El entrenador de los ourensanos confía en recuperar a Paco Del Águila durante el parón y trabajará sin otros cuatro jugadores en la ventana FIBA
08 nov 2022 . Actualizado a las 22:21 h.Las tres últimas derrotas han cobrado una cara factura en cuanto a sensaciones de un Club Ourense Baloncesto que apenas ha competido ante el Coruña, Cantabria y Melilla. El parcial de una victoria y cinco derrotas es un mal augurio para un equipo que, sobre el papel, debe jugarse las habichuelas de la permanencia ante rivales como un Melilla que lo doblegó: 95-77.
Guillermo Arenas, entrenador cobista, reconoce problemas en su equipo: «Tuvimos opciones en el primer y segundo cuarto. Llegamos al descanso metidos en el partido, pero en el tercero tuvimos esos dos o tres minutos en los que da la impresión de que no podemos reaccionar, lo que nos viene pasando desde Riazor. Después el rival mantiene la diferencia y ya no logramos remontarla».
Con todo, el técnico asturiano está confiado en que el trabajo de su plantilla ofrecerá beneficios en las próximas semanas: «Hasta el partido de Castellón competimos bien, con mayor o menor acierto, pero a partir de ahí tenemos esos agujeros que debemos erradicar. Tengo la sensación de que el equipo aún no alcanzó en los partidos el nivel que exhibe en los entrenamientos y eso es algo que debemos trabajar».
Máxime teniendo en cuenta que el próximo visitante en el Pazo será otro rival directo, como un Melilla al que dejaron escapar vivo el pasado domingo: «Es cierto que se trataba de una jornada trascendental para nosotros, pero apenas está empezando el torneo y debemos mejorar el rendimiento que tuvimos allí de inmediato».
Durante la ventana FIBA, el macedonio Stojan Gjuroski y el argentino Tomás Chapero son los dos jugadores que se han desplazado con sus selecciones. También se ausentaron los norteamericanos Chaz Williams y Shaun Willett,para realizar trámites para poner en regla su documentación. A ellos se suma un Del Águila que se ha perdido por lesión los últimos partidos: «Con Paco llevamos a cabo una planificación especial. Intentó regresar la pasada semana, pero las pruebas que realizamos no nos dejaron buenas sensaciones. Esta semana tampoco estará al ritmo del grupo, pero esperamos que sí se incorpore en la siguiente, ya pensando en que llegue para la próxima jornada».
Los jugadores que se quedaron en Ourense trabajarán toda la semana en entrenamientos matutinos, sin el colofón del partido de competición. En la siguiente retomarán el ritmo normal, en principio con todos sus efectivos disponibles. De vuelta al Paco Paz, el choque ante el Albacete será otro examen prioritario para las opciones del COB.