Pese a la tirantez entre los grupos, hubo acuerdo para pedir fondos para la plaza de abastos
03 sep 2022 . Actualizado a las 05:00 h.El Concello de Ourense celebró ayer el primer pleno del curso político. La sesión era escasa de contenido y empezó tranquila, hasta el punto de que el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, se permitía dedicar el tiempo a publicar en sus redes sociales una reflexión sobre el éxito de la canción Take on me, de A-ha. Sin embargo, pronto afloró la tensión preelectoral en la que está instalada la política municipal.
No en vano, era el primer pleno tras las negociaciones fallidas de una posible moción de censura de PSOE y PP contra Jácome. Y el alcalde no dejó pasar la oportunidad de sacar el tema. Criticó al portavoz socialista, Rafael Rodríguez Villarino, de quien dijo que «se puso de rodillas» para tratar de conseguir ese pacto: «Intentaba hacer con el PP lo mismo que nos criticaba a nosotros». El líder del PSOE trató de evitar la confrontación pidiendo que el debate se ciñese a los asuntos previstos en el orden del día y acusó a Jácome de utilizar «torticeiramente» el pleno.
Ese llamamiento no evitó que la tensión fuese creciendo cada vez más. Jácome también tuvo palabras de crítica hacia el PP. Además de cuestionar en varias ocasiones la gestión que los concejales populares hacían de sus áreas, el alcalde arremetió contra el nuevo líder de la formación popular y candidato para el año 2023. Criticó el «silencio» de Manuel Cabezas en las últimas semanas y dijo que «o bien es un inepto o bien es un malvado», decantándose finalmente por la segunda opción.
También fueron tensos los enfrentamientos del alcalde con el portavoz de Ciudadanos, Pepe Araújo, a quien muchos sitúan junto a Cabezas en la candidatura del PP para las próximas elecciones. «Lo único que buscas es el sueldiño», le dijo Jácome. Sin embargo, el todavía líder del partido naranja centró sus críticas en el PSOE, concretamente en el sector socialista que rechazó la posibilidad de impulsar una moción de censura. «Grazas a eles imos a telo de alcalde ata o 2023», resumió.
Araújo apuntó, además, a que la división interna del PSOE es la que motivó el debate ayer de una moción que criticaba el uso de la azotea de la sede de la Policía Local como «palco vip» para seguir el tramo urbano del Rali de Ourense el pasado mes de junio. También Flora Moure, del PP, habló de ello como fruto de la «guerrilla interna» del PSOE. Durante la discusión de este asunto, el concejal de Seguridad, Telmo Ucha, arremetió, sin nombrarla, contra la jefa de la Policía Local. «Se le acabó la mamandurria», dijo.
Pese a la tensión, durante el pleno hubo acuerdos. Se aprobaron por unanimidad mociones de la oposición para poner en marcha más medidas contra los pinchazos a mujeres en actividades de ocio, para rebautizar la calle Tras Alameda con el nombre del alcalde fusilado Manuel Suárez, para reclamar fondos de la Xunta y de la UE para el entorno de la Plaza de Abastos Número Uno y para pedir tres nuevos juzgados en la ciudad.
En todo caso, la sesión terminó de forma abrupta. Aprovechando el turno de ruegos y preguntas, la concejala socialista Concha García criticó el modo de llevar los plenos por parte de Jácome y este dijo estar satisfecho. «Entonces es que no está bien de la cabeza», le dijo la edila. El alcalde respondió entonces que se sentía insultado y que ella era «malísima, nefasta». La oposición amagó entonces con abandonar la sala y el regidor acabó levantando la sesión. Hasta la próxima.
