El servicio ha conseguido reducir los tiempos de espera para tener los resultados: menos de una hora las más urgentes
14 jun 2022 . Actualizado a las 22:11 h.El nuevo laboratorio del CHUO cumple su primer año en funcionamiento. Una fecha que fue elegida por los responsables de los servicios de análisis clínicos de los grandes hospitales gallegos para visitar el de Ourense de la mano de su máxima responsable, Delfina Suárez.
El sistema de automatización inteligente, único en Galicia, respondió por encima de las expectativas. Se procesaron ocho millones de analíticas o determinaciones procesadas, de las que el 75 % eran programadas y el resto urgentes. No solo se consiguió subir el volumen de muestras analizadas, sino también reducir los tiempos de procesamiento. En el caso de las analíticas de los pacientes hospitalizados se redujeron las esperas a la mitad y ahora están listas en noventa minutos; mientras que las urgentes lo hacen en menos de una hora. Las analíticas solicitadas por atención primaria están disponibles en la historia clínica del paciente en 24 horas.
El nuevo sistema se montó después de un estudio de la demanda y las necesidades de los laboratorios del área sanitaria, tanto de los tres hospitales (el CHUO y los comarcales de Verín y Valdeorras) como de los centros de salud. Es un sistema plenamente informatizado y con un puesto de mando que permite ver en tiempo real lo que se está analizando en los tres laboratorios (hay pruebas que se hacen en Verín y O Barco), además de realizar electrónicamente la petición de una analítica y volcar el resultado en la historia clínica del paciente, para que pueda consultarla cualquier médico del Sergas o el propio afectado.
Gran parte del sistema funciona como una autopista a la que se incorporan las muestras, con viales rápidos para las urgencias. Aplicando la inteligencia artificial, sabe detectar cúando aumenta la demanda para poder reducir los tiempos de respuesta.
El laboratorio central está situado en el sótano del edificio Cristal y tiene una superficie de 1.500 metros cuadrados, que fueron totalmente reformados para el nuevo servicio. Está estructurado por áreas funcionales de recepción preanalítica (con clasificadores automáticos capaces de registrar hasta 1.200 muestras por hora), bioquímica, inmunoquímica o serología. Estas tres últimas áreas están integradas en un sistema de automatización inteligente que recibe las muestras, las redirige hacia los analizadores y las almacena en hasta 70 destinos de clasificación.
En el laboratorio, sesenta profesionales trabajan en las diferentes áreas, con espacios específicos para el abordaje de los procesos relacionados con la reproducción asistida, la autoinmunidad o las alergias.