Hace un par de días, tomando un café en una conocida cafetería de la ciudad, su propietario me contaba que por primera vez había decidido cerrar un día a la semana. No porque quisiera, sino porque no encuentra más personal para una correcta organización de los turnos y descansos. Y así piensa seguir hasta que encuentre más personas a las que contratar.
Con uno de los niveles de paro más altos de Europa, la escasez de trabajadores en España es un caso para estudiar. En determinadas actividades, muy en particular en las relacionadas con la producción industrial, pero como vemos no solo en ellas, es un problema que no ha dejado de crecer durante los últimos años. Es una de las paradojas del mercado laboral de este país. Con la pandemia, además, el problema se ha agravado. En este momento estamos en una situación que, si no se frena de alguna manera, amenaza con bloquear la actividad productiva en algunos sectores.
Encontrar mecánicos de mantenimiento, caldereros industriales, soldadores o carroceros es cada vez más difícil pese a la alta demanda por parte de las industrias, lo que evidencia un desajuste entre la oferta actual del mercado laboral y la demanda de las empresas.
En el Polígono San Cibrao, a través de la Asociación, tratamos de corregir esta situación ofertando formación en algunas de las especialidades más demandadas por las empresas. No resolvemos el problema, pero ayudamos a paliarlo al menos en nuestro ámbito. Y aún así, no deja de llamar la atención que cuando abrimos el plazo de matrícula para estos ciclos formativos, que además son gratuitos, no haya colas frente a nuestra sede. Al contrario, cubrimos las plazas, eso sí, pero no sin esfuerzo, lo que contrasta de nuevo con el porcentaje tan elevado de parados que hay en este país, también en Ourense.
Las empresas, por su parte, intentan atajar esta escasez por su cuenta, formando a su propio personal para que realicen estos trabajos para los que no encuentran profesionales fuera. Zanjan el problema puntual al que se enfrentan, pero desde luego así no se resuelve el problema del paro juvenil, que sigue creciendo en nuestro país de forma altamente preocupante.
Creo que esta realidad que cualquiera puede ver es la prueba más evidente de que la Formación Profesional sigue siendo la gran asignatura pendiente de nuestro sistema educativo, que produce un exceso de universitarios que acaban en el paro o en profesiones que nada tienen que ver con su formación, mientras no logra abastecer de profesionales (por lo general bien pagados) a las empresas de sectores como el industrial.
El centro de innovación de la Formación Profesional de Galicia, que estará en Ourense, señala un interesante e inteligente camino para acompasar la formación de nuestros jóvenes con las demandas del mercado laboral, pero creo que la solución definitiva no llegará hasta que los grandes partidos de este país firmen un gran pacto de Estado por la educación, en particular por la Formación Profesional. Y eso sí que, lamentablemente, no parece estar nada cerca.
José Antonio Rodríguez es el presidente de la Asociación de Empresarios del polígono de San Cibrao das Viñas.