Una ciudad para vivir

Ruth Nóvoa de Manuel
Ruth Nóvoa OURENSE

OURENSE

15 may 2022 . Actualizado a las 12:48 h.

Es una de las frases favoritas del alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, desde hace años: «Lo medible no es opinable». Algo que se puede medir es la ejecución presupuestaria. Es lo que el Concello gasta cada año de lo que tenía previsto gastar. Se trata de un porcentaje que no ha dejado de bajar en los últimos tiempos: del 83 % del 2015 a menos del 70 % en el 2016 y 2017. A partir de ahí, menos del 60 % los años siguientes. Un 51 % en el 2020 y un 41 % en el 2021. Aunque sea medible, también se puede opinar sobre ello. Lo ha hecho la oposición, que considera que se trata de un nivel de ejecución irrisorio. Es un síntoma más de la situación de parálisis que atraviesa la ciudad en un momento (a un año de las elecciones municipales) en el que muchos ciudadanos empiezan a impacientarse con el futuro político más inmediato. No es para menos.

Y en ese futuro se cuela el pasado. Después de meses de runrún era el presidente del PP ourensano, José Manuel Baltar, el que decía en voz alta el nombre del exalcalde Manuel Cabezas para ponerlo sobre el tapete. ¿Cualquier tiempo pasado fue mejor? Supongo que siempre hay que mirar hacia delante, que no se puede vivir de recuerdos ni de nostalgia. Pero si le plantamos cara al presente (por ejemplo en el espejo de la ejecución presupuestaria, pero también en otras realidades como las concesiones públicas en precario) lo que está claro es que se puede mejorar. Si me apuran, a los partidos no les hará falta ni imprimir un programa electoral. Supongo que lo que la mayoría queremos está claro y no exige fuegos de artificio político: seguridad, limpieza, movilidad, espacios de ocio, actividades sociales y culturales, árboles... Cosas simples.

Cuando llegue la hora de votar no nos vengan con alta política. Traigan solo una ciudad para vivir.