Tito Gómez y Paula de Oliveira son los propietarios de un local ourensano en el que comer y también bailar
12 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.
Cuando el ourensano Tito Gómez y la brasileña Paula de Oliveira se conocieron, se enamoraron y juntos formaron su propio equipo. Eran clientes del bar Santana, en la calle Emilia Pardo Bazán. Cuando se enteraron de que cerraba. Apostaron por hacer tándem también en lo profesional. Así surgió su negocio de hostelería, al que llamaron Auditorio y en el que dentro de unas semanas cumplirán ocho años. «Los dos estábamos en paro, nos surgió la oportunidad y decidimos ir para adelante», cuenta Tito.
El local es para público de todos los gustos. Por el día, su oferta es tranquila. Muchos clientes van cada mañana a tomar café y a leer el periódico. Otros se quedan a comer, para degustar alguna de las raciones que Paula elabora con gusto y sabrosura. «Son todas opciones de tapeo. Lo que más sale son nuestras croquetas de jamón y las alitas de pollo con salsa picante», afirma la hostelera. También dan bocadillos y hamburguesas. Pero la versión más divertida del Auditorio llega los fines de semana al caer el sol. «Los viernes y sábados por la noche somos un pub», comenta Tito. Su objetivo es conseguir que la que gente vaya a reírse y a pasarlo bien», añade. Para ello pinchan música variada que va desde el rock al reguetón. Pero esta pareja tiene claro el punto fuerte de su bar. «Somos una gran familia, la gente que viene se queda y repite con nosotros. Esto es como estar en casa y eso es lo que más enorgullece», termina Tito.