El PP recupera la alcaldía de Viana do Bolo 7 años después

María Cobas Vázquez
María Cobas O BARCO

OURENSE

Santi M. Amil

Andrés Montesinos fue elegido regidor con los cuatro votos del PP y los dos tránsfugas con los que en septiembre del 2020 firmó la moción de censura contra el BNG

12 ene 2022 . Actualizado a las 19:59 h.

El Partido Popular recuperó esta mañana la alcaldía de Viana do Bolo. Andrés Montesinos ostenta de nuevo un cargo que ocupó desde 2003 al 2015. En aquel año perdió la mayoría absoluta. Tanto entonces como en el 2019 encabezó la lista más votada, pero el apoyo del PSOE dio por dos veces el bastón de mando al nacionalista Secundino Fernández. Eso sí, en ninguno de los dos mandatos llegó a fraguarse un bipartito y el BNG gobernó en minoría. Ya en el primer período hubo amago de moción de censura, entonces con Jesús Salgado (hoy presente entre el público en el salón de plenos) como único edil del PSOE; y se consumó en el segundo, en septiembre del 2020, cuando dos concejales socialistas (de los tres que había), Abelardo Carballo y Santiago Barja, se pasaron al grupo de los no adscritos para firmar la moción de censura con el PP. El acuerdo entonces fue repartirse la alcaldía en lo que restaba de mandato. Así, aquel 1 de septiembre fue elegido regidor Abelardo Carballo, que el pasado día 30 dimitió para cumplir el acuerdo con Montesinos, que desde entonces estaba ejerciendo en funciones. Carballo se despidió con duras críticas al portavoz del BNG.

Ahora ya tiene el bastón, y seguirá siendo alcalde hasta las próximas elecciones. Su candidatura fue la que sumó más votos, pero no la única. En la votación los ediles tuvieron que elegir entre los tres candidatos: Andrés Montesinos, Secundino Fernández y la socialista María Páez, que el pasado lunes anunció que se presentaba. Decía entonces que las cuentas le daban para ganar, a pesar de que reconocía que no había hablado con el BNG. Entendía que los nacionalistas la apoyarían para evitar que gobernase el PP. Pero no fue así. El BNG presentó a su cabeza de lista. De poco sirvió que Páez tirase de historia para recordar que en el 2019, «o BNG precisaba do PSOE e o PSOE respondeu», en alusión a que sin los votos socialistas el BNG estaría en la oposición. 

El BNG ni siquiera apoyó la petición del PSOE de que el voto fuese en urna. «A elección de alcalde é unha cuestión que é moi importante para os veciños, ten que sacarse de demagoxia, politiqueos e historias», dijo Fernández. Así que a viva voz los concejales fueron votando a su candidato. María Páez recibió uno solo, el suyo propio, los cuatro ediles nacionalistas apoyaron a Secundino Fernández y Andrés Montesinos contó con los cuatro votos del PP y los dos de los ediles no adscritos.

Rematada la votación, Páez atacó al BNG. «Esperaba que tiveran claro quen era o seu adversario político [en alusión al PP]», dijo. Añadió: «Unha vez máis, o BNG foi quen puxo no goberno ao PP». Y recuperó su frase del pasado lunes, cuando aseguraba que le daban los números para ser elegida alcaldesa. «A min si que me daban as contas, con principios e fundamentos sería xusto que eu tivera saído», espetó, asegurando que, en todo caso, en poco más de un año serán los votantes los que tengan la oportunidad de elegir. «E van saber o que teñen que facer».

Secundino Fernández, por su parte, tiró también de recuerdos para asegurar que lo vivido esta mañana era la segunda parte de la «moción da vergoña» del 2020, «na que fixeron o paripé de nomear a Abelardo Carballo e agora quitan a careta» para devolver al PP a la alcaldía. «O PSOE disfrazados de concelleiros non adscritos vende os votos dos veciños cun obxectivo claro: expulsar ao BNG e poñer ao PP». Fernández dijo que la moción de censura tuvo como objetivo «impedir que goberne o BNG e que Viana colla os aires de modernidade que estaba collendo». Recordó que en el 2015 la izquierda consiguió, por primera vez en la historia de la democracia, acabar con la mayoría absoluta del partido conservador, al que acusó de ser «un foco de corrupción». Tras una primera etapa «dun alcalde monicreque, repítese a alcaldía de Montesinos». No quiso terminar sin alabar los logros de su gestión en cinco años en la alcaldía. «Demos solución a problemas enquistados, melloramos infraestruturas, demos un novo aire cultural... (...). Foi unha actuación política dirixida á xente», dijo.

El portavoz de los no adscritos y alcalde hasta el pasado día 30, Abelardo Carballo, comenzó felicitando a su sucesor para después dirigirse directamente a Secundino Fernández, a quien le espetó: «A moción non foi contra o BNG, foi contra vostede e a súa xestión». También quiso salir al paso de las declaraciones de María Páez asegurando que las cuentas le daban para ganar el bastón de mando, dando a entender que los dos ediles no adscritos iban a apoyarla. «Nunca o PSOE se puxo en contacto nin negociou nada cos concelleiros do grupo de goberno», remarcó, asegurando que la campaña impulsada por la edila era una falsedad. Y remató, eso sí, congratulándose de que el PSOE por fin cumpliera su promesa electoral de votarse a sí mismo, al contrario de lo que sucedió en 2019, «que no último momento nos obrigaron a votar ao BNG».

Cerró el turno de intervenciones el nuevo alcalde. Montesinos aseguró que no iba a entrar en las «patrañas e mentiras» del BNG porque era un día para la celebración. Remarcó que comenzaba «unha nova etapa con moita ilusión e gañas de traballar». Aseguró que seguirán trabajando los seis concejales «como un único equipo» y avanzó que los vecinos podrán encontrarse todas las mañanas de lunes a viernes en el consistorio, con las puertas abiertas para recoger quejas, ideas y sugerencias. 

Ya finalizado el pleno, Montesinos anunció que con toda probabilidad Abelardo Carballo será su primer teniente de alcalde, y que los dos ediles no adscritos tendrán cabida en la lista del PP en las próximas elecciones si así lo quieren. No solo ellos. Montesinos aseguró que varias personas de la candidatura socialista en 2019 le han mostrado su apoyo y su intención de pasarse el PP. «Moita xente se me está ofrecendo», dijo. Sobre las declaraciones de Páez, preguntado si en algún momento temí por la alcaldía, respondió: «Sempre che queda aquela cousa pero eu máis tranquilo que nunca, sei a persoa como é tamén e os bulos que di».

Y quiso hablar de futuro. «Temos moi bos contactos coa Xunta e a Deputación de Ourense», remarcó en alusión a los proyectos que el bipartito tiene en marcha, anunciando compromisos de financiación de la obra de la Casa da Androlla, que quieren acondicionar para poder celebrar la multitudinaria comida del entroido; así como para la reforma de la plaza de abastos. Y habló del potencial que la llegada del AVE a A Gudiña tiene para Viana do Bolo en materia de turismo.