El Tribunal Supremo ordena a la Audiencia de Ourense juzgar una trama de accidentes falsos destapada en 2011

Marta Vázquez Fernández
Marta Vázquez OURENSE / LA VOZ

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El alto tribunal cree que los jueces ourensanos no debieron inhibirse del caso, en el que se investigaba a diez sospechosos

16 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace ya diez años que la Guardia Civil destapó una trama dedicada a la estafa a compañías aseguradoras por parte de personas que simulaban haber sufrido accidentes de circulación y presentaban partes falsos. En la que se denominó Operación Aleta, se hicieron numerosos arrestos, considerándose como cabecilla del presunto grupo a Santos A. G., el propietario de un taller de compraventa y reparación de automóviles con sede en A Valenzá. Se calculaba entonces que el fraude a las aseguradoras podría haber superado el millón de euros.

Pero el caso nunca llegó a ser juzgado. Tras una instrucción compleja que dirigió el juzgado de A Pobra de Trives, el asunto llegó a la Audiencia provincial de Ourense en septiembre del 2018. Diez sospechosos se sentaron en el banquillo de los acusados para responder de los delitos de estafa y falsedad documental que les imputaban la Fiscalía y las aseguradoras Axa, Línea Directa, Pelayo, Mapfre, Groupama y Liberty, pero a última hora la sala se declaró incompetente para ver el asunto, y ordenó devolver el caso al juzgado de instrucción.

A la Fiscalía, no le pareció correcta aquella decisión la y recurrió al Supremo, que ahora, tres años después, le da la razón. El caso debe ser juzgado y será la Audiencia quien se encargue de hacerlo, si bien habrá que nombrar un tribunal distinto, tal y como ha señalado el alto tribunal español.

Se cree que los sospechosos obtuvieron indemnizaciones, algunas veces por siniestro total del coche y, otras, por su reparación. La Fiscalía solicitaba penas de entre cinco meses y trece años de prisión, según el diferente grado de responsabilidad que se atribuían a los imputados.