El centro, que se inauguró un 4 de octubre del 2001, cumple dos décadas afianzado como un referente comercial y de ocio en la ciudad
05 oct 2021 . Actualizado a las 12:49 h.Hoy hace veinte años se cortaba la cinta inaugural del centro comercial Ponte Vella, en las riberas del río Miño. El proyecto de la sociedad Ucosa, formada por una comunidad de propietarios, veía la luz en una jornada en la que no faltaron autoridades, actuación de la Real Banda de Gaitas de la Deputación de Ourense y hasta una tirada de fuegos artificiales. El lleno en el centro estuvo garantizado durante los días posteriores a su apertura, con la llegada a Ourense de nuevas firmas de sectores como la moda o la restauración. Entre las autoridades del primer día estuvieron los por aquel entonces conselleiro de Industria, Juan Rodríguez Yuste, el alcalde de Ourense, Manuel Cabezas, y presidente de la Deputación, José Luis Baltar. Se materializaba de esta forma un proyecto cuyas primeras reuniones, allá por 1994, tuvieron como escenario las instalaciones de la Cámara de Comercio, presidida entonces por Jorge Bermello, y como protagonistas a más de medio centenar de empresarios ourensanos. La apuesta empresarial se plasmó en un proyecto que se presentaría en 1997 y, tras dos años de trámite, sería aprobado en 1999, cuando se dio luz verde al inicio de las obras.
Desde su apertura muchas cosas han cambiado en Ponte Vella, que se ha ido adaptando a las nuevas tendencias y que ha superado hasta una pandemia. El centro tiene una superficie de 58.000 metros cuadrados construidos y 21.000 de comercio. Cuenta con 76 establecimientos distribuidos en tres plantas donde encontrarás todo lo que buscas, desde moda nacional e internacional, complementos, moda infantil, calzado, joyería, recreativos, telefonía, electrodomésticos, óptica, hipermercado, decoración, deportes, estética, restaurantes y ocho salas de cine. El potencial de atracción gira en torno a tres de sus principales locomotoras, con raíces netamente gallegas: Gadis, Zara y Galicine.
La oferta se completa con un estacionamiento de dos plantas, con capacidad para 680 vehículos, que desde hace unos años ofrecen la opción de aparcamiento gratuito todas las noches, desde las 23.00 hasta las 12.00 horas del día siguiente. También tiene unas terrazas de 13.000 metros cuadrados. A lo largo de estos veinte años han sido muchas las actividades organizadas y también los personajes públicos que han pasado por sus instalaciones. Desde las cantantes Gisela o Natalia hasta el actor Miguel Ángel Muñoz han servido para acercar el centro y su propuesta a los ourensanos. La campaña navideña ha sido también uno de sus puntos fuertes, con actividades para todas las edades y con la pista de hielo, que tras unos inicios más humildes, ha ido creciendo en tamaño hasta variar de ubicación en la terraza de la zona alta para acoger toda la demanda.
Tanto han cambiado las cosas en veinte años, que Ponte Vella ha preparado un programa de actividades para celebrar esta efeméride que está encabezado por eventos con drones y realidad virtual, algo impensable cuando el mítico personaje de Los Simpson, Bart Simpson, se dejaba ver por el centro en el 2001 para promocionar las instalaciones al poco tiempo de su apertura.
La construcción del complejo comercial proporcionó a la ciudad un elemento más de modernidad en las riberas del Miño, coincidiendo en el año al puente del Milenio. Uno de los aspectos destacables del diseño está en la fachada acristalada, en la que se empleó vidrio reflectante y de baja transmisión.