El Estado tarda 25 años en cumplir su promesa sobre la variante norte

Miguel Ascón Belver
Miguel Ascón OURENSE / LA VOZ

OURENSE

La variante norte enlazará con la carretera Nacional 120 en Quintela de Canedo.
La variante norte enlazará con la carretera Nacional 120 en Quintela de Canedo. Santi M. Amil

El Consejo de Ministros autoriza la licitación del primer tramo por 28,78 millones

08 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Pocas promesas políticas han sido tan reiteradamente incumplidas como la construcción de la variante norte. El Consejo de Ministros autorizó este martes la licitación de las obras del tramo Eirasvedras?Quintela. Se trata de un trámite decisivo para la ejecución de las obras, pero han tenido que pasar 25 años.

La primera referencia a este proyecto en La Voz de Galicia data del día 2 de diciembre del año 1996. A los pocos meses de hacerse el Partido Popular con el poder, el Gobierno presidido por José María Aznar presentó un proyecto de Presupuestos Generales del Estado para el ejercicio 1997 que preveía 160 millones de pesetas. Según la planificación anunciada entonces, las obras estarían terminadas en 1999.

Nada más lejos de la realidad. Después de Aznar, pasaron también por el sillón de La Moncloa el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, el popular Mariano Rajoy y, finalmente, Pedro Sánchez, de nuevo del PSOE. Presidente tras presidente, el proyecto no terminaba de arrancar y, aunque figuraba regularmente en los presupuestos generales del Estado, esas partidas nunca llegaban a ejecutarse o eran demasiado pequeñas para generar los avances necesarios.

Ahora el Consejo de Ministros ha autorizado por fin la licitación del tramo Eirasvedras-Quintela, de una longitud de 1,7 kilómetros. Ese vial será el primer tramo de la A-56 (la autovía a Lugo), que terminará en Eiravedras, donde se encuentra el enlace con la A-52 (la Autovía das Rías Baixas). La variante llegará hasta Quintela, donde habrá un enlace con la Nacional 120. Liberar de tráfico esa carretera es uno de los objetivos principales de la actuación, entre otras cosas, porque el Concello de Ourense tiene desde hace años un proyecto para convertir el ramal de entrada a la ciudad desde Vigo por la N-120 en el llamado «bulevar termal», que sería una vía de doble sentido, más humanizada, con zonas de aparcamiento y mejores accesos a las pozas públicas que existen a orillas del río Miño.

Aunque la dotación presupuestaria prevista para la obra en este año 2021 es escasa -250.000 euros- la licitación se hará por 28,78 millones de euros, según acordó este martes el Consejo de Ministros. Además de los enlaces definitivos de Eirasvedras y Quintela, el proyecto contempla una conexión provisional en Tarascón que permitirá continuar en el futuro con las obras hasta A Casilla para así completar la variante norte y, por lo tanto, el primer tramo de la autovía hacia Lugo.

Obras singulares

Además, el Gobierno destaca como «obras singulares» un viaducto en Quintela de Canedo sobre la N-120 y la línea ferroviaria Monforte de Lemos?Vigo, un nuevo puente sobre el río do Porto y dos pasos inferiores, uno bajo el tronco y otro bajo uno de los ramales del enlace de Quintela, que permitirá el cruce de este ramal sobre el ferrocarril Monforte de Lemos?Vigo.

El PSOE celebra el acuerdo y el PP remarca que podría haberse adoptado ya a finales del 2019

«Ver por fin esta licitación será para mí una satisfacción. Llevo toda mi vida parlamentaria peleando por esta carretera». Son palabras de Celso Delgado, diputado del PP por Ourense desde el año 2000. Se trata de un proyecto que, según dice, se encontró con «un cúmulo de complicaciones administrativas», pero Delgado asegura que ya estaba todo listo para licitar las obras desde finales del año 2019. El actual Gobierno ha estado «dilatando los trámites administrativos», asegura el parlamentario popular, que confía en que el Ejecutivo de Sánchez cumpla y en los próximos días publique la licitación en el Boletín Oficial del Estado. Si no hay más retrasos, las obras podrían comenzar a mediados del año 2022, calcula.

Desde el PSOE ourensano celebraron también el acuerdo adoptado por el Consejo de Ministros. Reconocen que se trata de «unha das obras máis lonxevas dos orzamentos xerais do Estado», pero culpan de ello al Partido Popular. «Os trámites desta obra clave para Ourense só avanzaron grazas a gobernos do PSOE, fronte a un PP que foi unha trituradora de investimentos para a provincia», dice el comunicado difundido por los representantes socialistas de la provincia en el Congreso (Adolfo Pérez Abellás y Uxía Tizón) y en el Senado (Miguel Bautista).

[Consulta aquí la página completa de 1996]