Los no adscritos ya son tercera fuerza en Ourense, donde Jácome gobierna con otros dos ediles

Miguel Ascón Belver
Miguel Ascón OURENSE

OURENSE

Pleno en el Concello de Ourense
Pleno en el Concello de Ourense Santi M. Amil

En un solo día, tres ediles de Democracia Ourensana y uno de Ciudadanos anunciaron que abandonan sus respectivos partidos

13 may 2021 . Actualizado a las 18:52 h.

Parecía imposible que la corporación del Concello de Ourense estuviese aún más fragmentada, pero la situación política en la ciudad sigue complicándose. Este jueves los tres concejales díscolos que aún seguían en Democracia Ourensana anunciaron su pase a no adscritos. Y solo unas horas después hizo lo mismo Laureano Bermejo, hasta ahora concejal de Ciudadanos. Todos seguirán como ediles, pero sin siglas políticas que les amparen, con menos tiempo de intervención en los plenos, sin asesores y sin sueldos. Además, su voto no contaría para una eventual moción de censura, aunque si esa opción era ya difícil antes, ahora se antoja imposible ante la intensa fragmentación existente.

Los nuevos no adscritos se unen a Manuel Álvarez, el único que había en esta situación en la corporación y que también formaba parte de DO hasta su expulsión hace unas semanas. Ahora hay, por lo tanto, cinco no adscritos y podría considerárseles la tercera fuerza del Concello de Ourense. Hay ya más ediles con esa situación que los que tiene el gobierno de Democracia Ourensana (3), el BNG (2) o Ciudadanos (que ahora se queda con solo un representante, José Araújo, a la espera de que el secretario municipal informe si es posible mantener el grupo con un único edil, ya que esa eventualidad no está prevista en el reglamento orgánico del Ayuntamiento ourensano).

Los tres nuevos ex de DO y el de Ciudadanos comparten destino como no adscritos, pero sus motivaciones para dar este paso son diferentes. Los de Democracia Ourensana -Miguel Caride, María del Mar Fernández Dibuja y María Teresa Rodríguez Garrido- mantienen un encendido enfrentamiento con el alcalde y líder de la formación, Gonzalo Pérez Jácome, desde que el pasado mes de agosto lo denunciaron por irregularidades en la gestión económica del partido. De hecho, el regidor los expulsó, pero ellos recurrieron al juzgado, que ordenó su readmisión provisional mientras no resolvía el fondo del asunto. Trataron sin éxito de hacerse con el control del grupo y ahora deciden irse sin esperar a la sentencia.

Lo hacen «defraudados», según dicen: «No existe democracia interna, todas las decisiones las adopta unilateralmente el alcalde Gonzalo Pérez Jácome sin atender a ninguna otra razón que no sea su propia voluntad, sin contar absolutamente con nuestra opinión, no permitiéndosenos expresar nuestro parecer ni intervenir en ningún debate». El regidor cree, sin embargo, que detrás hay una motivación económica, porque la semana pasada les anunció que ya no acudirían en representación de DO a las reuniones de las juntas de área (cuya asistencia se cobra a 86 euros la sesión). «Esto evidencia que los tránsfugas, los traidores, estaban única y exclusivamente por intereses», sentenció Jácome, que también perderá dinero con el movimiento de estos. Caride, además del Concello, pasa también a no adscrito en la Diputación y Democracia Ourensana perderá en total 3.000 euros de ingresos mensuales por la mengua en su representación en ambas instituciones.

En el caso del adiós de Laureano Bermejo de Ciudadanos, los motivos de la maniobra exceden lo local. El que fuera secretario de Organización del partido a nivel gallego llevaba tiempo apartado de la toma de decisiones. Además, se reconocía como discípulo de Fran Hervías, el responsable de Organización a nivel estatal de Ciudadanos con Albert Rivera. Su mentor dejó la formación hace unas semanas y ahora Bermejo ha decidido seguir sus pasos. Ahonda de paso en la crisis del partido.

En un comunicado, el concejal ourensano se muestra muy crítico con la dirección de Inés Arrimadas en España y con la de Beatriz Pino en Galicia, aunque no las nombra directamente a ellas. «¡Yo no he cambiado! Ha cambiado Ciudadanos», proclama Bermejo, que añade: «Es difícil reconocer al actual Ciudadanos y me duele a mí y a muchos afiliados ver en lo que lo habéis convertido». El portavoz del partido naranja y ya único miembro del grupo municipal, José Araújo, no ha querido valorar la baja de su compañero, aunque es probable que este viernes ofrezca una rueda de prensa sobre ello.