Derroche presenta un disco en el que colaboran artistas como Yosi, de Los Suaves
26 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Maneras de vivir, el mítico tema de Leño, es la explicación que da Borja González, voz y alma máter de Derroche, cuando se le pregunta por la razón de ser del grupo. Lo que viene a decir este roquero ourensano es que la música es su forma de entender y de canalizar la vida: «Es nuestro alimento y lo que sabemos hacer. No estamos seguros de si llegaremos a algo pero seremos muy felices en el intento». O como canta Rosendo: «No sé si estoy en lo cierto, lo cierto es que estoy aquí». El grupo nació en el 2005. «Y todavía no nos hemos cansado», apunta, entre risas, el batería, Javi Iglesias. Aunque por la banda han pasado músicos como Ramón Feijoo, Ricardo Vázquez o Manuel Feijoo, actualmente la formación la completan el bajista Jose Prado y el guitarrista Diego Vázquez -que es a su vez cantante de Malheira-. Todo comenzó por amor a la música. «Nuestros hermanos mayores ya tocaban, estábamos hartos de escucharles y de ver cómo disfrutaban haciendo lo que más les gustaba», dice Javi. «Nos picaba la curiosidad de saber cómo sería tener nuestra propia banda, vimos la oportunidad y nos lanzamos», apunta Borja. Muchas horas en la sala de ensayo dieron como resultado los primeros conciertos que evolucionaron en Parte del día y toda la noche, su primera demo con tres temas, y se diría que el eslogan más representativo del grupo. «Pues fue el fruto de una borrachera de un gasolinero de Trives que se nos subió al escenario en pleno concierto. La verdad es que nos hizo gracia y la frase sonaba bien, así que nos la quedamos», recuerda Borja.
Después de aquello y ya con Diego a la guitarra, llegó el primer disco de Derroche, A base de intenciones. «Somos una banda que bebe del rock de los 90 y creo que en este trabajo se deja ver», dice Javi. Grupos como Extremoduro, Los Suaves o Platero y tú están presentes en este disco, que incluye temas como La última canción, Recuerdos olvidados, Destino o Menuda rubia, una declaración de amor y al mismo tiempo un homenaje a la cerveza. Pero es que los Derroche son así, distintos de lo que parecen y siempre demostrando sus convicciones. Y persiguiendo sus sueños. «Seguimos aquí después de quince años porque insistimos, porque queremos que el rock siga vivo, a pesar de que vemos que el ámbito musical está muy cambiado y también los gustos de la juventud. Pero nunca estuvimos mejor que ahora», dice Diego. El grupo ha llegado a suponer más pérdidas que ganancias, al menos a nivel económico, pero muchas satisfacciones. «La industria musical es algo que ya no funciona, que lo petó en su día, hace 30 años, cuando se consideraba un trabajo artístico que tenía un valor, ahora mismo los que seguimos intentando tirar del carro lleno de piedras, tenemos que poner de nuestro bolsillo», continúa. No se quejan, puede que porque los tres compaginan su faceta artística con otros trabajos, pero es que a Derroche tampoco le va mal. Es cierto que atrás quedó la época de tirar millas en la carretera, de los conciertos en cualquier rincón de Ourense, sobre un escenario o en mitad de una plaza, con el público dando calor al grupo y entonando eso de «no nos iremos sin antes deciros adiós». Y que sobre ello influyó directamente la pandemia. «El rock para nosotros fue una forma de aprender sobre la vida. La música nos inculcó el respeto por los demás y nos enseñó la importancia de compartir, de sociabilizar y de ser tolerantes», explica Diego. El grupo de rock ourensano quiere volver a esos momentos y por eso están a punto de presentar su nuevo disco, que verá la luz en mayo. La tinta del tiempo, compuesto por ocho canciones y un bonus track en gallego, Feridas. Un trabajo que cuenta con colaboraciones de artistas tan interesantes como Yosi, de Los Suaves, o Juankar de Boikot. «Para nosotros es amistad, compartir un tema es un buen plan siempre, así que en este trabajo decidimos aunar fuerzas», explica Javi.
«Hemos hecho un disco muy mimado en el que se aprecia la madurez y las horas invertidas»
Los tres músicos ourensanos dicen que este trabajo es una demostración de madurez y de calidad artística. «Este es un disco muy mimado, totalmente autoproducido, al que hemos dedicado todas las horas del mundo», explica Javi. «Nunca estuvimos mejor que ahora», reitera Diego. El disco La tinta del tiempo incluye temas que muchos ya vitorearon en los directos de Derroche, como Amor de piedra o Jonás. El resultado tras pasar por el estudio de grabación y muchos meses de trabajo, estará disponible tanto en plataformas digitales como en la versión física en mayo. Con muchas ganas de interpretar en concierto, los cuatro miembros de Derroche —que completa el bajista Jose Prado— han podido saborear de nuevo lo que es tocar en exteriores, o al menos fingirlo, porque están inmersos en la grabación del que será el primer vídeo del disco, dirigido por Alán Pérez. Escogieron Feridas y el escenario es el antiguo psiquiátrico de Toén. «Habla de los seres olvidados, de esas personas que pasan por la vida como si no existiesen, pretende dar voz a los que no la tienen», dice Diego, compositor del tema.