El presunto homicida de Velle dejó de medicarse porque engordaba

m. v. OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Santi M. Amil

El sospechoso del crimen estaba siendo tratado por un psiquiatra pero dejó de ir a las consultas hace ocho meses

27 feb 2021 . Actualizado a las 14:11 h.

El presunto homicida de Velle sigue ingresado en el mismo complexo hospitalario en el que se recupera una de sus víctimas. Álvaro Blanco, de 26 años, continúa en estado grave a causa de las heridas de arma blanca provocadas por su primo, Daniel Torres, quien tras tocar el timbre de su vivienda los atacó presuntamente a él y a su novia en la madrugada del pasado viernes, provocándole a ella, de 22 años, heridas mortales.

Y mientras la víctima se recupera, en otra unidad hospitalaria, la de agudos, sigue ingresado Daniel, que el pasado lunes fue trasladado desde la prisión provincial de Pereiro de Aguiar ante su reiterada negativa a medicarse. El presunto homicida, de 36 años, estaba siendo tratado por un psiquiatra del Sergas que le pautó un tratamiento y lo supervisaba en consultas periódicas, pero desde hace ocho meses no había vuelto al médico y, según él mismo reconoció, había dejado de tomar la medicación porque engordaba. Llegó, al parecer, a pesar hasta 120 kilos, por lo que optó por dejar el tratamiento, lo que podría haber empeorado su situación y tenido algo, o mucho, que ver, en el brutal crimen que ahora se le imputa.

En su estancia en el hospital, desde el que será de nuevo enviado a prisión cuando reciba el alta, se espera que los psiquiatras que lo tratan hagan un informe sobre su estado, aclarando si padece o no alguna patología que pueda ser relevante a la hora de valorar su imputabilidad en lo que por ahora se califica como dos delitos de homicidio, uno de ellos en grado de tentativa. Su abogada, además, ha pedido otro informe al psiquiatra que los estaba tratando para que explique su situación y antecedentes. Un posible brote psicótico podría explicar una conducta para la que no parece haber otros detonantes, ya que la relación entre parientes no era mala.