Dio positivo en alcohol tras ser interceptado quebrantando el toque de queda
OURENSE
El acusado dijo que llevaba una hora en el coche, pero los agentes ratificaron que lo vieron conduciendo
16 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.«Consideramos mucho más creíbles las versiones de los agentes que las del acusado». Es una de las frases que recoge la sentencia en la que se condena a Alberto G. R. como autor de un delito contra la seguridad vial, tras considerar probado la magistrada que circuló bajo los efectos del alcohol. Y es que la magistrada tilda de «inconsistente» e «inverosímil» el relato prestado en el juicio por el acusado, quien tras ser interceptado al volante de un coche el pasado 8 de diciembre en la capital, dio positivo en la prueba de alcoholemia con un resultado de 0,73. En el juicio, el acusado no negó que hubiera bebido alcohol, sino que aseguró que no había conducido, asegurando que cuando los agentes lo identificaron llevaba «un buen rato» aparcado esperando a una amiga. Aseguró que se había tomado en el coche una cerveza. Los agentes, sin embargo, confirmaron que lo vieron conduciendo y que les sorprendió porque había toque de queda y a esa hora era el único coche que había en la calle. Dijeron, además, que el acusado «iba por el centro de la calzada». Para la jueza esto es motivo suficiente para condenarlo al pago de una multa de 1.600 euros y un año de privación del permiso.