La terminal de buses se estrena con un lunes de retoques

Miguel Ascón Belver
miguel ascón OURENSE / LA VOZ

OURENSE

La lluvia complicó la primera jornada laborable con la nueva terminal de buses en servicio
La lluvia complicó la primera jornada laborable con la nueva terminal de buses en servicio Santi M. Amil

Usuarios y operarios compartieron las instalaciones en el primer día laborable con la nueva infraestructura en servicio

08 feb 2021 . Actualizado a las 20:04 h.

Llegar a la nueva terminal de autobuses de la estación intermodal no es fácil. Con el aparcamiento del ADIF aún en obras, encontrar donde dejar el coche es una tarea que requiere de paciencia. También es difícil llegar a pie porque el acceso no cuenta con un paso de peatones en su entorno inmediato y mucha gente cruza igualmente por allí, con el peligro que ello supone. Y, justo del otro lado, lo primero que recibe a los usuarios es una acera inacabada con un gran charco de agua.

La lluvia puso a prueba la nueva infraestructura este lunes, el primer día laborable con la nueva terminal de buses en funcionamiento. En el edificio había operarios trabajando para instalar un pavimento antideslizante que evitase resbalones y fuera también había obreros instalando la señalización de la distancia de seguridad en los andenes, arreglando pequeños desperfectos en las papeleras o dando los últimos retoques a la puerta de seguridad.

Los trabajadores se mezclaban con los usuarios de la estación. Los consultados por La Voz de Galicia se mostraron satisfechos con la infraestructura, especialmente en comparación con la de O Pino (ahora demolida). «Aquello era una pocilga. Esto es una maravilla, mejor imposible», decía José Benito López, que esperaba un bus con destino a Entrimo. Hace ese viaje con una frecuencia semanal y asegura que la terminal está bien dimensionada. «Ya le sobra», dice incluso. Lucía Freites, que volvía a casa tras visitar a allegados en Ourense, también comparó la vieja terminal con la nueva y dice que esta es «muy bonita».

«Aínda non lle collemos a graza», reconocía, por otra parte, Antonio Araújo Rodríguez, que destacaba lo cómodo que es que las terminales de buses y de trenes estén tan próximas entre sí, algo que le será de gran utilidad a su hija, que trabaja en Sanxenxo, según dice. «Antes era un problema porque podías perder a conexión indo dunha á outra», explica el hombre.