Así quiere el gobierno de Jácome que sean las terrazas en la era poscovid

Miguel Ascón Belver
MIGUEL ASCÓN OURENSE

OURENSE

Terrazas en la capital ourensana
Terrazas en la capital ourensana Santi M. Amil

El anteproyecto de ordenanza sitúa el cierre como máximo a las 2.30 horas

29 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Las terrazas de la hostelería, hoy cerradas por las restricciones del coronavirus, funcionan en Ourense de forma peculiar. El gobierno municipal aprobó una instrucción «exprés» para facilitar los trámites y compensar al sector las pérdidas que les está provocando la pandemia. Pero el caso es que el Concello no dispone de una ordenanza que establezca con claridad y con vocación de permanencia los requisitos que deben cumplir las terrazas en la ciudad. El gobierno municipal entregó ayer un anteproyecto a los grupos de la oposición para su análisis.

La regulación de esta actividad lleva tiempo atascada y es un asunto que en ocasiones ha generado ciertas tensiones entre vecinos y hosteleros, especialmente en el casco viejo. «Hacer viable ese conflicto de intereses no es fácil y creemos que se puede conseguir con este borrador», explicó el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, tras la reunión con los portavoces del resto de partidos. Ahora estos estudiarán el documento y la próxima semana llevarán sus aportaciones a un nuevo encuentro. Después, según avanzó, convocará a los colectivos afectados.

Horarios y requisitos

Y es más probable que el gobierno municipal se tope con ciertas resistencias. El borrador -redactado por el city manager, Francisco Cacharro- establece un horario de cierre que unos querrían ampliar y otros reducir, como ya ocurrió con las alegaciones a la instrucción «exprés» que hoy en día está en vigor. La asociación de vecinos O Cimborrio reclamaba, por ejemplo, limitar las terrazas a las 23.00 horas como máximo. Pues bien, el anteproyecto presentado ayer prevé el cierre a la 2.30 los jueves, viernes y vísperas de festivo de los meses de mayo, junio, julio, agosto y septiembre (y hasta las 1.30 horas el resto de la semana). Durante el resto del año, los horarios máximos serán, según el caso, a las 1.30 y a las 0.30 horas.

La ocupación, en ocasiones excesiva, de la vía pública también suele generar conflictos y el anteproyecto elaborado por Cacharro trata de resolver esta cuestión con un amplio desarrollo normativo. Por regla general, las terrazas situadas en aceras deben situarse a una distancia mínima de 1,80 metros de la fachada (que se puede reducir a 1,50 metros excepcionalmente) y a 0,40 metros de la calzada. En las calles peatonales -pero donde se permite la circulación restringida de vehículos- deberá quedar un espacio libre de al menos 3,5 metros en el caso de las calles de sentido único y de 6 metros en las de doble sentido.

El borrador detalla las características específicas que deben reunir las mesas, las sillas, las sombrillas, las tarimas o los elementos de climatización que pueden instalarse en las terrazas. Además, se establece un régimen sancionador para quienes incumplan. En el caso de las infracciones muy graves se prevén multas de entre 1.501 euros y 3.000 euros, así como la suspensión definitiva de la licencia e incluso la inhabilitación para la obtención de otras autorizaciones municipales de este tipo durante dos anos. Uno de los motivos para ello será, por ejemplo, colocar un 10 % o más de las mesas permitidas en la licencia.

Debate político

«Esta ciudad lleva décadas con el problema de que no tiene una ordenanza como Dios manda y esperamos resolverlo en este mandato», explicó el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, que confía en completar el proceso en un plazo de cuatro meses. Rafael Rodríguez Villarino, del PSOE, reclamó más participación de los grupos en la elaboración de la norma. La portavoz popular, Flora Moure, pidió máxima transparencia por tratarse de un documento que afecta a toda la ciudadanía. José Araújo, de Ciudadanos, agradeció el trabajo realizado por el city manager y manifestó su intención de recoger aportaciones del sector para enriquecer el texto. Y, por el BNG, Rhut Reza calificó de «decepcionante» la reunión de ayer por la falta de propuestas de algunos grupos.