La Audiencia Provincial deja sin efecto su inhabilitación y la condena a pagar 2,1 millones
21 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.La principal señalada por la quiebra de la empresa Aspanas Termal era Rosa Carrera, que fue gerente de la entidad. Un juzgado la había inhabilitado durante quince años para administrar bienes ajenos y, además, la condenó a abonar 2,1 millones de euros. Sin embargo, esa resolución ha quedado sin efecto tras resolver la Audiencia Provincial el recurso presentado por la afectada. Entiende esta nueva sentencia que no quedó demostrado que ella actuase con autonomía resolutiva sino únicamente como representante de la Fundación Amencer Aspanas.
El abogado de la exgerente, Xosé Antón Pérez-Lema compareció en rueda de prensa este martes para informar de la resolución y se mostró confiado en que ni la Fiscalía ni la administración concursal la recurrirán ante el Tribunal Supremo. Además avanzó que estudiará nuevas actuaciones penales o civiles contra los gestores de la fundación y de la asociación Aspanas así como contra responsables de la Administración como cooperadores.