Devolverán tres mil euros que se gastaron con la tarjeta de un paciente del CHUO

La Voz OURENSE / LA VOZ

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Santi M. Amil

La Audiencia confirma la condena por estafa para una madre, su hija y el yerno

08 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

No tuvo dudas el juez de lo penal y no las tienen ahora los magistrados de la Audiencia provincial sobre la culpabilidad de tres acusados, madre, hija y yerno, que se las ingeniaron para robarle la cartera a un hombre de 77 años que se encontraba ingresado en el complexo hospitalario de Ourense y luego se fueron de compras con su tarjeta de crédito, tras engañarlo para conseguir su clave secreta.

Y es que pese a la insistencia de la más mayor de las acusadas en defenderse asegurando que el perjudicado le había dado su tarjeta de crédito porque quería enamorarla, los magistrados valoran la cantidad de pruebas que existen en su contra, especialmente la llamada que el yerno hizo al enfermo para conseguir el número PIN de la tarjeta de crédito, haciéndose pasar por un empleado de su oficina bancaria. «Tal alegación se reputa plenamente inverosímil por carente de credibilidad», advierten los togados del tribunal ourensano, quienes tildan de «tajante» el testimonio del perjudicado, quien aseguró que no conocía de nada a la acusada o sus familiares. «No media siquiera atisbo de amistad o cercanía personal de madre e hija acusadas con el denunciante, que viabilice tal argumento justificativo de compras y retiradas de efectivo, siendo innegable la tenencia de las tarjetas por su padre», dice el fallo, que recuerda la llamada y su importancia como prueba de cargo.

Seis meses de cárcel

No caben dudas, a juicio de la sala, sobre la culpabilidad de Emilia P. R., Milagros S. P. y Adrián R. V., como autores de un delito de estafa, por considerar probado que aprovecharon la convalecencia del perjudicado para quitarle su documento de pago, con el que sacaron dinero en varios cajeros para luego irse de compras. Se confirma, así la condena a cada uno de ellos, una pena de seis meses de cárcel, y les obliga además a devolver al perjudicado los 3.198 euros que le sustrajeron de forma ilícita. Sacaron 2.200 en efectivo de varios cajeros; con el resto compraron distintos artículos en Mercadona y Stradivarius.