«Con estos EPI se trabaja en condiciones extremas», apunta una de las veteranas
12 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Este año marcado por la pandemia había sido el elegido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como año internacional de la enfermera y la matrona. Un colectivo profesional cuyo colegio cumple cien años en la provincia. La fecha se conmemoró con la inauguración de una obra escultórica creada en acero pulido por Gonzalo Eiriz.
La pieza, denominada Lux Aurea, se ubica en la entrada del nuevo edificio del Hospital de Ourense y evoca «la silueta de una enfermera hecha con formas circulares», según el autor; el material elegido representa cómo las enfermeras aparecen siempre duras y firmes ante los pacientes. Esta obra artística, de 2,80 metros de alto más el pedestal, quedará como homenaje permanente a las enfermeras ourensanas, cuyo trabajo elogiaron todas las autoridades presentes en el acto organizado por el Colegio Oficial de Enfermería de Ourense para conmemorar su centenario.
En representación de los enfermeros que se jubilan se entregó un detalle a María Ángeles Gómez y a Manuel Pulido Picouto, que ejercieron la profesión durante más de cuarenta años. Pulido apuntó que el acto fue «muy emocionante». Este enfermero cree que hoy la profesión sí está reconocida institucional y socialmente.
Su compañera, Ángeles Vázquez, señaló que es un trabajo «duro pero gratificante». Máxime en los tiempos actuales del coronavirus. Pidió a los responsables que «cuiden a la enfermería, con personal suficiente, porque trabajar con estos EPI es jorobado. Son unas condiciones extremas. Deben dar importancia a la formación y a tener a los profesionales preparados para trabajar en las ucis». Animó a las nuevas enfermeras que se inician en la profesión a que afronten el trabajo «con ilusión y ganas, que defiendan sus intereses y se sientan valoradas». En su opinión, su labor debería estar más valorada, también durante esta pandemia, más allá de las palabras y los aplausos. «Falleció mucha gente, y las que estuvimos en contacto con ellos fuimos las enfermeras», mencionó durante el acto.
A ese último momento hizo referencia el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, en su alocución: «Están al pie de la batalla en esta época tan dura que nos ha tocado vivir. Los enfermeros son los primeros que están cuando llegamos al mundo y también son los que están en el momento de la muerte».
La presidenta del Colegio de Enfermería de Ourense, Ascensión Pérez Sampayo, comenzó haciendo referencia a Florence Nightingale, precursora de la enfermería moderna y a una de sus máximas: «A menos que avancemos cada año, cada mes, cada semana, estaremos retrocediendo». En estos cien años, dijo, el trabajo de enfermería ha pasado de ser un oficio a una profesión. La presidenta de la organización colegial apuntó que desde el inicio de la pandemia en marzo las enfermeras han dejado clara su vocación sin importar las circunstancias y agradeció su compromiso. Presentó un proyecto que ya ha visto la luz: el libro de Carlos Álvarez Nebreda Cien años de historia del Colegio Oficial de Enfermería de Ourense, que ya se puede consultar en la biblioteca del organismo.
En el acto intervino el gerente del área sanitaria de Ourense, Verín y O Barco, Félix Rubial, quien afirmó: «A enfermaría guía os pasos da asistencia sanitaria, é o colectivo máis grande que coida das persoas». Y aludió al nombre de la escultura para pedir que la luz áurea sea la luz eterna y de la enfermería. Por su parte, el delegado de la Xunta en Ourense, Gabriel Alén, manifestó que «as enfermeiras de hoxe son líderes en resposta, aportando experiencia e empatía» y agradeció el compromiso del colegio ourensano con la provincia.
Las casualidades de la jornada, según Jácome o Rosendo Fernández
En sus discursos, las autoridades políticas agradecieron todas el trabajo y la labor de las enfermeras. Más allá de los clásicos reconocimientos estuvieron las referencias del alcalde de Ourense y del vicepresidente de la Diputación. Ambos se refirieron a curiosidades o casualidades que, según su punto de vista, se dieron en este día.
Para Gonzalo Pérez Jácome, resultó curioso que este 2020, en el que se cumplen los cien años de existencia del colegio de enfermería de Ourense, coincida con el centenario de la publicación del primer ejemplar de la revista Nós. Sobre la obra inaugurada, dijo que el enclave elegido para ubicarla era «perfecto» y que le gustó el trabajo de Gonzalo Eiriz aunque reconoció que entendía poco de arte.
La peste medieval
Rosendo Fernández, vicepresidente de la Diputación, vio otra coincidencia, en cambio. Que el acto del centenario de la profesionalización de la enfermería se celebrase el día de San Martiño, un santo vinculado en Florencia (Italia) a la sanación de una peste en el Medievo, en un año marcado por una pandemia. Fernández aludió a que el trabajo de las enfermeras es «integral y multidisciplinar» y destacó las facetas de empatía y comunicación que tienen que tener estos profesionales. Apuntó que los ciudadanos pueden ayudar al colectivo y a salir de la pandemia comportándose con «prudencia e sentidiño»
El autor de la escultura, Gonzalo Eiriz, dio además las gracias a las enfermeras que se encontraban en el interior del edificio hospitalario cuidando en ese momento de pacientes.