Los brotes de Barbadás y Ribadavia elevan a 500 los casos en residencias

p. varela / maría cobas OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Agostiño Iglesias

Os Gozos entra «en fase de regresión», tras las últimas altas registradas

27 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Los dos brotes detectados en las residencias de Barbadás y Ribadavia -esta última todavía en fase de espera para saber el resultado de algunas PCR a usuarios y trabajadores- eleva a 500 los casos activos en los centros de mayores de la provincia en la segunda ola de la pandemia. Una cifra redonda que está a punto de igualar a la registrada en la primera ola, cuando los casos rondaron los 520.

José Manuel Pazos Seco, director médico adscrito por la Xunta para la gestión de la residencia de Barbadás tras la entrada del coronavirus en la residencia, señala que «entre los días 19 y 20 se realizaron pruebas de saliva entre el personal, que dejaron dos positivos». A continuación, se realizaron test PCR entre usuarios y empleados, y ahí fue donde se constató que el covid-19 se había colado en silencio. «Hasta entonces estaban habilitadas las visitas una vez a la semana, una hora, y solo una persona. Siempre con cita previa. Desde entonces, se cancelaron. Es un tema complicado, porque el problema de prohibirlas es que hay mayores que se sienten abandonados», explica. Al cierre de esta edición, y según fuentes consultadas, ningún usuario de la residencia de Barbadás había ingresado. «De momento creemos el brote que está controlado», agrega Seco. El alcalde de Barbadás por el PSOE, Xosé Manuel Valcárcel, instó a que la Xunta «habilite o persoal oportuno, porque os que están traballando teñen xa unha carga adicional polos compañeiros afectados».

El BNG anunció este lunes la presentación de tres iniciativas en el Parlamento autonómico para preguntar a la Xunta sobre el brote de coronavirus registrado en la residencia Nosa Señora dos Miragres, en Barbadás. «Dende hai tempo existían datos que advertían dun perigo certo de contaxio en Barbadás. Era imperativo extremar as medidas de prevención e coidado nos centros situados no concello», señaló Iago Tabarés, diputado por Ourense.

Seis grandes focos

Fue el pasado 15 de agosto cuando la provincia de Ourense volvió a aparecer en el listado oficial de la Consellería de Política Social, que recoge todos los casos activos en las residencias, tanto para mayores como para personas con discapacidad. Era un único caso aquel día, el de un trabajador de Domus VI en Barra de Miño (Coles). Desde entonces se han contagiado 376 usuarios y 124 empleados de hasta 32 centros diferentes. Entre los trabajadores ha habido 38 altas, cifra que se eleva hasta los 162 en el caso de los residentes. Sin embargo, entre los mayores no todas son buenas noticias, porque en el camino se han quedado 40 personas que no consiguieron superar el covid-19. Los fallecimientos se registraron en los centros que han tenido grandes focos de coronavirus hasta ahora: Os Gozos, Val de Monterrei, Las Salinas y Lobeira.

En Os Gozos, de O Pereiro de Aguiar, donde se registró el mayor brote durante esta segunda ola -se infectaron 165 usuarios y 47 empleados de los 192 y 96, respectivamente, del centro-, han fallecido 25 mayores. Todavía están pendiente de curación 91 residentes -varios de ellos están ingresados en el CHUO- y 41 empleados. José Manuel Pazos Seco, que también participa en la intervención de la Xunta en Os Gozos, donde supervisa el proceso de medicalización de la instalación, señala que la residencia «está en una fase de regresión». «Se han comenzado a dar altas y seguiremos con el proceso que se llevó a cabo hasta ahora mientras vemos cómo evoluciona. Creemos que esto puede ir mejorando, aunque todavía hay alguna persona un poco tocada que sigue en el hospital ingresada», indica.

Mientras, en la Val de Monterrei, hasta la fecha, se contagiaron 57 usuarios -quedan 5 pendientes de curación, y fallecieron 9- y 16 trabajadores, de los que 12 han recibido el alta.

En Nosa Señora do Viso, en Lobeira, suman dos bajas tras un brote que afectó a 47 usuarios y 18 empleados. Siguen siendo positivos 4 mayores y 6 trabajadores.

Por otro lado, en Las Salinas, en Ourense, se detectó un brote con 15 usuarios y 4 trabajadores infectados. Queda pendiente de curación un mayor, mientras que otros dos no pudieron superar la enfermedad.

«A miña nai vai polo seu terceiro positivo nos test, pero é asintomática e atópase ben»

A sus 91 años, la madre de José Manuel Brea resiste contra el covid-19 en la residencia de Os Gozos, de la que es usuaria. «Fun un sábado visitala, e con boas medidas de seguridade. Déronme unha pantalla de protección a maiores da mascarilla, desinfectei o calzado, fixéronme a enquisa epidemiolóxica e non tiven contacto físico coa miña nai. Un día despois, o domingo, chamei e todo ía ben. Pero chegou o luns e notificáronme que lle fixeran unha proba porque había alguén entre o persoal que tiña o coronavirus. Tardaron catro días en darnos o resultado», cuenta.

Desde que se constató la entrada del virus en el recinto, la mujer ha pasado tres pruebas PCR y todas arrojaron resultado positivo. «Pero ela é asintomática e atópase ben. Non tivo febre, respira de forma normal e os análises de sangue déronlle un resultado normal», cuenta Brea. Por ahora, él se mantiene en contacto diario con su madre a través del equipo médico que la supervisa. «Eu quería vela, así que solicitei facer unha videochamada. Ó principio pedíronme que deixase pasar tres ou catro días, porque naquel momento estaban desbordados», añade.

El virus, que también sorprende a los familiares por su capacidad para cebarse o pasar de largo en función de su víctima, parece no haber hecho mella en ella, que lleva más de quince días aislada en la residencia, sin dificultades por el momento. «A cada persoa cólleo de distinta maneira. Debe ser unha persoa moi forte, así que estou seguro de que sairá adiante», dice esperanzado.