A juicio por disparar con una carabina a 64 farolas: «Joel era el que tenía la mejor puntería»

la voz OURENSE / LA VOZ

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m. v.

Al acusado le imputan un delito continuado de daños, por haber tiroteado 64 luminarias, un coche y dos viviendas

29 sep 2020 . Actualizado a las 17:43 h.

En los últimos días del mes de febrero del 2018 en distintas aldeas del ayuntamiento de San Cibrao das Viñas aparecieron  destrozadas las bombillas de las farolas. Más de sesenta luminarias tuvieron que ser sustituidas por la empresa encargada del servicio, lo que motivó que desde el ayuntamiento se pusiera una denuncia en la Guardia Civil, sospechando que pudiera tratarse de un acto vandálico. Días después varios jóvenes del ayuntamiento, cuatro de ellos menores de edad, fueron imputados en los hechos al constatarse, ellos mismos lo reconocieron en el juicio, que habían disparado a parte de aquellas farolas con una escopeta de balines. Fueron condenados.

Este martes, el único sospechoso de aquellos hechos que era mayor de edad, Joel N. N., estaba citado para sentarse en el banquillo de los acusados del juzgado de lo penal 1, para responder del delito de daños que le imputa el Ministerio Fiscal. No se presentó, pero la vista se celebró en su ausencia y a ella sí acudieron algunos de los que en su día fueron condenados por este asunto. «Joel era el que tenía mejor puntería», aseguró uno de ellos responsabilizando a su entonces compañero de pandilla de los disparos al mobiliario público, a un coche y a dos viviendas. Otro testigo también reconoció que se divertían probando puntería de esa forma: «Éramos niños y nos hacía gracia», dijo, responsabilizando al acusado «del 90%» de los disparos realizados con una carabina comprada por el investigado en los días previos a los incidentes. El armero contó a la Guardia Civil que le había regalado una caja de balines.

Tanto el alcalde de la localidad, Manuel Pedro Fernández, como el responsable de la empresa de iluminación encargada del mantenimiento de las farolas constataron que se produjeron los daños, asegurando este último testigo que el coste de las reparaciones había ascendido a seis mil euros.

 Se autoinculpó ante la Guardia  Civil 

Ya en las conclusiones la representante del Ministerio Fiscal solicitó que al acusado se le imponga una condena de 18 meses de multa, a razón del pago de 8 euros diarios, como responsable de un delito continuado de daños. Asimismo, esta parte reclama que indemnice a los perjudicados, entre ellos el Concello de San Cibrao. La defensa, por su parte, pidió la absolución por considerar que no hay evidencias de que su cliente fuera quien disparó la carabina, restando valor a su autoinculpación ante la Guardia Civil. Dijo también que no hay prueba en relación al número exacto de farolas que fueron dañadas.