El alcalde de A Rúa a un Guardia Civil: «¿Quién cojones te crees?»

m. v. OURENSE / LA VOZ

OURENSE

LOLITA VAZQUEZ

Los agentes han informado sobre un incidente con el regidor por el horario de cierre de un local durante el confinamiento

05 jul 2020 . Actualizado a las 17:42 h.

No siempre las relaciones entre los alcaldes y las fuerzas de seguridad de sus ayuntamientos son las mejores. En la capital ourensana es bien conocido el distanciamiento que existe entre el alcalde, Gonzalo Jácome, con su Policía Local, a la que incluso ha llegado a llamar «mafia», pero no es este el único caso de mal rollo entre políticos y agentes que existe en la provincia.

El de A Rúa es otro ejemplo de tensa convivencia. Sin ir más lejos, los agentes de la Guardia Civil de esa localidad han denunciado al regidor, Álvaro Fernández López, del PP, por una presunta infracción administrativa, una falta de respeto, tras un incidente ocurrido en la madrugada del pasado 31 de mayo. Según consta en las diligencias, que han sido enviadas a la subdelegación del Gobierno por si pudiesen ser constitutivas de sanción, el alcalde se personó la noche de autos en el cuartel diciendo a los agentes que no debían estar en el puesto, sino patrullando por la localidad, ya que eran las cuatro de la mañana y había bares abiertos. Seguidamente los agentes habrían ido a un local en el que había algunos integrantes de la corporación, y habrían advertido a su propietario de que debía cerrar, regresando nuevamente al cuartel. Allí se personaría por segunda vez el regidor, esta vez de muy malos modos, ya que se dirigió a uno de los agentes diciéndole: «¿Quién cojones te crees que eres para andar diciendo que el alcalde está cerrando los bares, tú no sabes con quién estás hablando?». Un segundo agente habría tenido que intervenir, tratando de calmar al regidor, recriminándole que su conducta «no era la adecuada» y recordándole que no era quien para dirigirse de esa forma a los guardias.

Como no, los agentes informaron del incidente a su superior, que días después se reunió con el regidor para tratar de aclarar lo ocurrido aquella noche y limar asperezas, si bien el encuentro no habría salido según lo esperado. «Lo que pasa es que los chavales tienen la piel muy fina y posiblemente el enfado de ellos se deba a que estén escondiendo una mala actuación», habría llegado a decir el regidor respecto al proceder de los guardias, una aseveración que a juicio de la Benemérita podría ser una velada acusación respecto a una actuación prevaricadora de los agentes, algo que desde el cuerpo no parecen estar dispuestos a tolerar.

Pese a los intentos de comunicar con el regidor para recabar su versión sobre el incidente, La Voz no ha podido finalmente obtener respuesta alguna por su parte.