La localización de un acusado fugado aplaza un juicio por tráfico de drogas en la Audiencia

m. v. OURENSE / LA VOZ

OURENSE

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Las peticiones de prisión llegan casi hasta los cinco años

12 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Después de varios meses en paradero desconocido, Tirso Alejandro F. C. fue localizado el pasado martes por las autoridades policiales en la localidad burgalesa de Pancorbo. Sobre su persona pesaba una orden de búsqueda porque tenía pendiente comparecer ante un tribunal por su presunta relación con una red de tráfico de drogas que operaba en la comarca de Valdeorras así que su arresto permitirá que los tres investigados por ese asunto respondan por los delitos contra la salud pública que se les imputaban.

Eso sí, la localización de Tirso ha provocado que el juicio por este caso destapado a principios del 2018 por agentes del grupo de estupefacientes de la Guardia Civil, tenga que ser pospuesto. Y es que la vista se había señalado para este jueves y no fue posible organizar un traslado a tiempo desde Burgos hasta Ourense, por lo que se señalará una nueva fecha para juzgar tanto a este hombre como a sus dos presuntos colaboradores, David D. Q. y Omar I. M.

La operación se había puesto en marcha en julio del 2017, tras haber tenido conocimiento los investigadores del instituto armado de la existencia de una red de narcotráfico que movía cocaína y hachís en O Barco y alrededores, y de ahí a otros puntos de la provincia. Semanas después, el hallazgo de un paquete con algo más de medio kilo de cocaína tirado en el arcén de la autovía A-52 activó las investigaciones, atribuyéndose posteriormente esta sustancia, valorada en 56.000 euros, a David, quien la habría arrojado por la ventanilla del coche en el que viajaba tras encontrarse con una patrulla de la Guardia Civil.

En registros realizados en el domicilio de Tirso, en Cea, los agentes localizaron distintas cantidades de cocaína y marihuana, hallándose también estupefacientes en una nave situada en Maside. Por estos hechos el sospechoso estuvo en prisión preventiva hasta febrero del 2018.

En cuanto a Omar, los agentes localizaron en la vivienda en la que residía en el momento de los hechos distintas cantidades de cannabis. Para él reclama el fiscal del caso una condena de dos años y nueve meses de prisión, mientras que para los otros dos acusados el reproche penal que se interesa es más elevado. Así, el fugado se enfrenta a una petición de cuatro años y ocho meses, mientras que la pena que se interesa para David es de cuatro años y dos meses de cárcel. Tras el último imprevisto, habrá ahora que señalar nueva fecha de juicio.