Los estudiantes de segundo de Bachillerato sorprendieron a sus profesores con una celebración virtual este viernes
16 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.¿Cómo despedirse después de 15 años en las mismas aulas y esquivando el coronavirus? Hay quien se habría confirmado un simple adiós. En Maristas, los alumnos de segundo de Bachillerato fueron un paso más allá, y este viernes, el día que la dirección del colegio tenía marcado inicialmente para la graduación de los estudiantes de último año, se vistieron de gala a primera hora de la mañana para darles una sorpresa a sus profesores.
«Llevábamos preparando la fiesta desde febrero, pero el virus trastocó el calendario normal. Esto, en realidad, fue cosa suya y de un profesor de Lengua Castellana que les sugirió la idea», dice Rafael Gómez, responsable de comunicación de Maristas. A falta del sonido del cambio de clase, el goteo de apariciones de los alumnos lo marca ahora la aparición de una nueva ventana en el ordenador.
Esta vez, los jóvenes aprovecharon la ocasión para enfundarse trajes, vestidos o corbata. Otros, como Javier Suárez-Vence, mandaban un guiño al equipo de sus amores vistiendo la camiseta del Celta. «Alguno también apareció con la máscara de Darth Vader, porque es aficionado a las películas de George Lucas», contaba Gómez. Esa fiesta improvisada dejó de piedra a más de un profesor, que no contaba con el acto y ya daba por perdida la conmemoración habitual por estas fechas.
«Fue inesperado, y primaron más las risas por la simpatía del momento», explica Rafael. Pero además, ya en frío y a través del grupo de WhatsApp que tienen los docentes, el gesto dejó un poso de gratitud entre los maestros, que vieron crecer a muchos de los que ayer les daban las gracias: «Al ver la conversación de después vi que alguno se emocionaba con lo que había pasado».