«La normativa sobre los ERTE no es clara, genera confusión»

m. v. OURENSE / LA VOZ

OURENSE

El polígono de San Cibrao, con escasa actividad empresarial
El polígono de San Cibrao, con escasa actividad empresarial Santi M. Amil

Los sectores de construcción, siderometal y comercio, los más afectados en la provincia por la falta de actividad

22 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Jornadas de hasta veinte horas en el despacho para atender, sobre todo, la avalancha de expedientes de regulación temporal de empleo que solicitan las empresas. Así es ahora el día a día para José Antonio Pérez, abogado experto en temas laborales, que desde el inicio del estado de alarma ha visto incrementarse el trabajo de forma directamente proporcional al ritmo en el que los negocios se veían obligados a echar el cierre y rescindir los contratos de sus trabajadores, o reducir sus jornadas laborales.

«Esto no lo habíamos visto nunca antes en el despacho», explica el profesional, preocupado como todos por las consecuencias económicas del parón. «Sabemos que no estamos en un pozo, pero es que no vemos la luz del túnel», asegura. Y es que a pesar de que ha pasado más de un mes desde que se decretó el confinamiento, sigue habiendo negocios que se acogen a los ERTE. «No todo el mundo lo presentó al principio. En la norma había algunas lagunas y contradicciones y hubo empresas o sectores que en un primer momento no se atrevieron», explica el abogado, que advierte que en su día, y ante la esa falta de claridad de la norma, hubo compañías que enviaron a casa a los trabajadores a cuenta de sus vacaciones. «La normativa no es nada clara, genera confusión porque no es precisa y los criterios son cambiantes. No es fácil estar al día en este asunto», afirma, añadiendo además que cuando se suspendieron las actividades no esenciales fueron muchos los negocios que creyeron que no se podrían presentar expedientes de regulación temporal de empleo.

Así las cosas, el goteo no ha cesado desde hace seis semanas. El motivo que alegan los afectados es el de «cierre por causa mayor» y asegura este abogado ourensano que en este tiempo se han presentado «decenas de solicitudes», además de atender las peticiones de asesoramiento incluso de otras provincias. Estos expedientes se presentan ante la Consellería de Economía de la Xunta, que tiene diez días para contestar; si pasa ese tiempo y no lo hace, se entiende ese silencio administrativo como una aceptación de la demanda. «Hasta ahora no nos ha venido ninguno denegado», confirma el abogado en todo caso.

Construcción, siderometal y comercio son los sectores que, en la provincia, más se han visto obligados a enviar al paro a sus trabajadores, pero a medida que han transcurrido las semanas se han ido incorporando otro tipo de negocios, como las clínicas de fisioterapia. Los que se acogen a esos expedientes de regulación laboral no pagan la Seguridad Social de sus trabajadores, y a ellos no se les descuenta la prestación de desempleo.