Un centenar de patrullas de la Guardia Civil velan a diario por la seguridad en toda la provincia

Marta Vázquez Fernández
m. vázquez OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Control de desplazamientos de la Guardia Civil en el acceso de la A-52 a la N-120
Control de desplazamientos de la Guardia Civil en el acceso de la A-52 a la N-120 Santi M. Amil

El cuerpo se ha reorganizado para sacar más agentes a la calle

04 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El estado de alarma ha provocado cambios en todos los estamentos de la sociedad y las fuerzas armadas no son ajenas, quizás menos que nadie, a las nuevas exigencias que supone el confinamiento de la población y la necesidad de velar porque se cumplan las recomendaciones sanitarias.

Y para dar respuesta a ese nuevo reto la Guardia Civil ha acometido en la provincia de Ourense un proceso de reorganización con el que se ha perseguido, y logrado, sacar a la calle a más agentes que nunca.

Así, diariamente son en torno a un centenar las patrullas del instituto armado que recorren a lo largo y ancho la provincia de Ourense, para velar por la seguridad de los ciudadanos y localizar a quienes se saltan el confinamiento sin motivo justificado, poniendo así en riesgo la seguridad del resto de ciudadanos.

Para lograr esta inyección de efectivos a pie de calle, en el cuerpo se ha decidido hacer algunos cambios en el funcionamiento de los cuarteles. Los más pequeños se han cerrado para que los guardias que los integran puedan estar patrullando por sus distintas zonas de influencia, centralizándose en los más grandes, denominados núcleos operativos, la recepción de las denuncias ciudadanas, que desde el decreto de alarma han caído notablemente.

De esta forma, los cuarteles de localidades como Ribadavia, Verín, Xinzo u O Carballiño, por poner algunos ejemplos, centralizan ahora el trabajo de oficina, reforzando los integrantes del resto la seguridad ciudadana.

Con esta nueva situación, diariamente hay alrededor de un centenar de patrullas en la calle, de las que unas 85 son del servicio rural, mientras que el resto pertenecerían al subsector de Tráfico la Guardia Civil.

Los fines de semana, más

Y la cifra, muy superior a la de cualquier jornada normal antes de que se decretara el estado de alarma, se dispara durante los fines de semana. Ante la previsión de que muchos ciudadanos intenten salir de sus pueblos o ciudades para trasladarse a segundas residencias o casas de familiares sin motivo justificado, los agentes redoblan la vigilancia en las carreteras, poniendo sobre el terreno hasta 160 patrullas, siempre en varios turnos. Especialmente sensibles para este tipo de desplazamientos se consideran las vías de alta capacidad, como la AG-53, que comunica Ourense con Santiago, y la autovía A-52, uno de los principales enlaces de entrada a Galicia desde Madrid y Castilla León. Así las cosas, el 80 % de la plantilla que tiene la Guardia Civil en la provincia se encuentra ahora dedicada exclusivamente a velar por que se cumplan las normas del estado de alarma.

Y aunque por ahora los casos de contagios por coronavirus entre agentes de la comandancia de Ourense se tildan de «aislados», en el cuerpo se intenta salvaguardar al máximo la seguridad y la salud de los funcionarios mediante las patrullas estancas, integradas siempre que sea posible por los mismos agentes, con el objetivo de minimizar lo máximo el riesgo de que se produzca un contagio masivo entre los compañeros.