El Poder Judicial decidirá este mes quién presidirá la Audiencia Provincial

Marta Vázquez Fernández
m. vázquez OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Santi M. Amil

Comarcalización y refuerzos en algunos juzgados, en los programas de los candidatos

11 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Dos magistrados optan a dirigir durante los próximos cinco años la Audiencia provincial de Ourense. Antonio Piña Alonso, actual presidente, y Ana del Carmen Blanco Arce, responsable de la sección segunda de este tribunal, son los candidatos entre los que tendrá que decidir el Consejo General del Poder Judicial. Precisamente, ambos comparecieron el pasado jueves ante la comisión permanente de este organismo para exponer sus programas y someterse a las cuestiones planteadas por sus integrantes. A lo largo de media hora, cada uno de ellos hizo un repaso breve por su trayectoria y méritos profesionales, detallando asimismo algunas de las cuestiones que consideran prioritarias para mejorar la justicia en la provincia de Ourense. A continuación respondieron ambos, durante otros treinta minutos, a cuestiones concretas sobre asuntos como la oficina judicial única, los efectos de la huelga o el expediente electrónico. La previsión es que antes de que finalice el mes de enero la decisión esté tomada.

La primera en comparecer fue Ana del Carmen Blanco, quien destacó la buena salud de la justicia en la provincia, si bien incidió en los problemas que presentan algunas salas, como el juzgado de Familia. Tildó de «dramática» su saturación y abogó por su especialización, así como por un reparto más equitativo entre los asuntos que manejan las salas de primera instancia, unas muy saturadas frente al bajo nivel de asuntos que manejan otras. También cree la magistrada que es necesario que el Juzgado de Instrucción 3 se concentre de forma exclusiva en violencia de género, para que no exista «un tratamiento a dos velocidades de este tema tan importante» e incluso apostó porque se comarcalice esta sala, tramitando asuntos de O Carballiño, Xinzo, Ribadavia y Celanova.

Destacó Blanco Arce el incremento de causas que ha registrado la sección civil de la Audiencia en el último año y apostó por medidas para reforzar este tribunal, que cuenta con tres magistrados frente a los cinco que conforman la sección penal. Consideró oportuno informatizar el reparto de asuntos, «en aras de la transparencia» y mencionó también la buena salud del juzgado de menores, considerando la posibilidad de que la jueza de esta sala pueda reforzar otras más saturadas. Y en cuanto a los dos juzgados penales de la capital, puso sobre la mesa la opción de especializar uno de ellos en violencia de género.

Para Antonio Piña es necesario afrontar una reorganización de los partidos judiciales, planteando como alternativa la comarcalización de salas y caminar hacia la implantación de una nueva oficina judicial, ya que el proyecto piloto que se intentó poner en marcha fracasó por el rechazo que levantó. «Estoy dispuesto a volver a retomarlo desde otro punto de vista, con diálogo», adelantó, destacando además los pasos dados hasta ahora para mejorar la atención de las víctimas de violencia de género y la necesidad de seguir avanzando aún más. Al igual que la otra candidata puso sobre la mesa la situación de saturación de algunas sedes, viendo necesaria la creación de un nuevo juzgado de familia. En cuanto a los penales, ve normalizada su situación y considera que el refuerzo del que disponen puede ya finalizar.

Abogar por la humanización y el acercamiento al ciudadano son cuestiones que el magistrado considera prioritarias. En su programa figura la puesta en marcha de una biblioteca para consulta ciudadana y un aula virtual en la que se recree la historia de los juzgados ourensanos. También quiere poner en marcha una exposición en la que se hagan constar los juicios más relevantes de la ciudad, que deriven en un aula interactiva. Fue crítico Antonio Piña con las comisiones de servicio, que provocan que algunos juzgados queden vacantes al pedirlas sus titulares. «Debe haber criterios claros», dijo.