La carretera N-120 estuvo cortada anoche en la capital ourensana
22 dic 2019 . Actualizado a las 13:44 h.El temporal ha azotado Ourense durante toda la jornada. Buen ejemplo de sus efectos es el estado del río Miño que, a su paso por la capital, está dejando imágenes sorprendentes, con olas que más bien parecen las del mar en un día de resaca. Han sido muchos los ourensanos que se han acercado a Velle para comprobar en primera persona la fuerza del agua. La Policía Local ha señalizado la zona para llamar a la precaución y evitar incidentes. Y es que se registró una grieta importante en el paseo da Lontreira, en una zona de aparcamiento, en el que ese momento habían estacionados sus vehículos varios ourensanos que querían hacer fotos de la situación del río.
Poco después de las doce de la mañana el río ha pasado de la situación de alerta a la de prealerta pero aún así el caudal sigue siendo extraordinario. Tanto, que los gráficos que utiliza la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil se le han quedado pequeños. Hace una semana el río llevaba en torno a 700 metros cúbicos por segundo y ahora supera los 3.100.
En prealerta está también el Sil a su paso por Valdeorras. Ya ha anegado varias zonas de O Barco y lleva mucha fuerza.
Por lo que se refiere al Támega, a su paso por Castrelo do Val y Rabal, está en alerta, según informa EFE citando a la Confederación del Duero.
Los anegamientos, por otro lado, han provocado problemas en las carreteras. Así, ha sido necesario cortar la vía que une Ribadavia y A Arnoia, a la altura de A Foz. Así mismo, el paseo fluvial está inutilizado.
En O Bolo, el temporal ha dañado la estructura de un puente de manera que Protección Civil cortó la carretera entre Barxa y O Seixo. Existen vías alternativas.
Además, el viento ha provocado la caída de árboles sobre las carreteras, en la línea de lo sucedido en los últimos días aunque para hoy se esperan rachas más fuertes. Según informa el 112, durante la pasada noche, un tren que cubría la línea entre Vigo y Barcelona chocó contra un árbol caído en las vías férreas en Ribadavia, sin registrarse daños personales. Debido al impacto, en torno a las 22.15 horas, el tren se averió y fue necesario que una máquina de socorro lo remolcara hasta la estación de Ourense con el pasaje a bordo. Las personas que viajaban en el tren terminaron el trayecto en autobús.
Además, una persona precisó asistencia médica ayer después de que le cayera encima del coche en el que circulaba un árbol en Cortegada.
La Guardia Civil retiró algunos en el tramo que une la carretera OU-536 con Luíntra, en el término municipal de Pereiro de Aguiar.
Según informó el 112, una persona necesitó asistencia médica después de que un árbol cayese encima del coche en el que circulaba en Cortegada. Ocurrió pasadas las cinco de la tarde.
La Policía Local y los bomberos de la capital se han visto desbordados por las incidencias y sus líneas están saturadas. Han tenido constancia de caídas de árboles, desprendimientos de diferentes elementos de edificios, vallas caídas, accidentes sin heridos...
Los semáforos de Juan XXIII no funcionaron durante parte de la mañana y además se produjeron anomalías en el alumbrado navideño.
En Ramón Puga un árbol amenazaba con caer sobre las vías, lo que provocó retrasos en la salida de un tren. Finalmente, se cortó para evitar riesgos.
Y el tráfico se vio ralentizado en la N-120 por la caída de un árbol sobre la carretera.
Por otro lado, en la ciudad el Concello de Ourense ha decidido suspender los dos conciertos previstos en el programa navideño, por la lluvia. Estaba previsto que la Coral Cantiga Xuvenil actuará a las 18.30 horas en Bispo Cesáreo, donde está instalado el belén, y Coro da Ra en el Paseo y los jardines del Padre Feijoo a partir de las 19.30.
