El temporal castiga Monterrei

M. D. / S. M. OURENSE

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Cedido

Las lluvias y el granizo también causaron desperfectos de distinta índole en Valdeorras, O Bolo y otras zonas del oriente ourensano

09 jul 2019 . Actualizado a las 12:47 h.

Una gran tromba de agua, procedente del desbordado río Búbal provocó una riada en el centro del pueblo de Infesta, en Monterrei. El agua, que transitaba a gran velocidad por el centro de la aldea, provocó graves daños en dos viviendas de este pueblo, a escasos metros de la capitalidad municipal, Albarellos.

El anegamiento también afectó a viviendas de Volada y Albarellos e Infesta. Se inundaron bajos de decenas de casas y, aunque no se registraron heridos, los daños materiales son relativamente cuantiosos. Fue necesario evacuar a una pareja atrapada y también cortar tramos en la N-525, en zonas inundadas por la lluvia caída.

El temporal también causó daños en viñedos de la Denominación de Origen Monterrei ubicadas en el municipio que lleva su nombre, resultaron dañados a última hora de la tarde por una granizada que destrozó parte de las vides y también causó notables desperfectos en la zona de Cualedro.

Los daños son especialmente relevantes en la parroquia de A Salgueira a escasos metros de la sede de la bodega de Crego e Monaguillo, una de las más conocidas de la comarca. Incluso se vieron afectados varios vehículos, inundados casi por completo.

El granizo también cayó con fuerza en O Bolo, donde el número de incidencias se multiplicaba a lo largo de la tarde. En O Barco la situación no fue mejor, las lluvias y la intensidad del granizo provocaron el corte de algunas calles. Otro de los efectos adversos fueron los desprendimientos en las carreteras de Éntoma y de Sobradelo, además de inundaciones de sótanos, que hicieron necesarias varias intervenciones de los servicios de emergencias.

En A Veiga, más cerca de Trevinca, la lluvia también fue torrencial, mientras en Laza y Verín, hubo inundaciones. En el centro del municipio verinense el agua llegó a superar el medio metro de altura, lo que dificultó el acceso a las casas de modo notable en algunas de las zonas del casco urbano.