LEB oro Los ourensanos, que tuvieron opciones de triunfo hasta el final, lograron evitar un alto coste económico del desplazamiento del play off
03 may 2019 . Actualizado a las 23:28 h.Melilla 69 Ourense 63
Derrota con buena imagen y sobreponiéndose a las numerosas adversidades del COB en Melilla, que perdió en los instantes finales un partido en el que tuvo opciones hasta el final y en el que le pasó factura el tormentoso viaje.
El COB comenzó el partido con el mismo desacierto y desconcierto en ataque y en defensa que le viene caracterizando en los últimos encuentros, aunque en esta ocasión con el posible atenuante del tormentoso viaje sufrido. Melilla dominó a placer el choque hasta los últimos dos minutos del segundo cuarto con Franch marcando el ritmo de partido y sacando a Vidal del mismo, con una dirección absolutamente desconcertante del uruguayo,y con un absoluto dominio interior tanto en lo que se refiere al rebote en ambos aros, como a la productividad ofensiva, primero con Dos Anjos y en la rotación de Balaban. Todo ello aderezado con minutos de inspiración en el triple y con un Agada imperial en el aspecto físico y que no encontraba oposición en la defensa cobista para anotar con fluidez en rápidas transiciones, al mismo tiempo que aplicaba una importante labor de desgaste sobre Ott.
Melilla era superior en todo y el COB tardó 3.30 en anotar su primera canasta, mientras sufría por su falta de referencias ofensivas con hasta un 0/5 en triples, con Rozitis impotente y desacertado y en general falto de tensión, estando siempre un punto por detrás de los melillenses en cada acción. Lo mejor para los de Gonzalo García es que Melilla parecía que podría empezar a romper el partido con diferencias superiores a los 10 puntos, alcanzando una máxima de 14 puntos (27-13) tras dos triples consecutivas locales en el comienzo del segundo cuarto, mermaba su poderío con las rotaciones, salvo en la zona con el dúo Dos Anjos?Balaban que seguía imponiendo su ley y las pérdidas de balón fueron dando vida al COB, consiguiendo anotar en transición ante sus dificultades para hacerlo en ataque estático contra la zona impuesta por Alcoba. La aparición de Zamora, con 8 puntos y los dos últimos minutos antes del descanso de Pepo Vidal, sirvieron para que el equipo llegase vivo al descanso (37-34) y con mejores sensaciones.
Lesión de Pepo Vidal
El comienzo del tercer cuarto no pudo ser peor para el COB con un triple de Agada y la lesión en una entrada a canasta de Pepo Vidal en un tobillo que le impidió volver a la pista. Un contratiempo importante a sumar más a todos los sufridos, pero que no impidió que gracias a los recursos tácticos defensivos de Gonzalo García de Vitoria, el liderazgo de Zamora y Ott en ataque y la clara mejoría en el rebote ofensivo, que el equipo luchase por la victoria hasta el último minuto. Incluso logró ponerse por delante en varias ocasiones en el último cuarto con ventajas de un punto. Sin embargo la nula rotación en el base y el sobreesfuerzo al que se tuvieron que someter Zamora y Ott en las labores ofensivas, acabó pasando factura, siendo clave de nuevo la falta de capacidad reboteadora defensiva del colectivo en general y de Rozitis en particular, que con un rebote que se dejó coger a falta de 40 segundos, concediendo dos puntos a Dos Anjos, puso la puntilla al meritorio partido cobista.
Derrota con buena imagen y sobreponiéndose a las numerosas adversidades del COB en Melilla, que perdió en los instantes finales un partido en el que tuvo opciones hasta el final y en el que le pasó factura el tormentoso viaje.
El COB comenzó el partido con el mismo desacierto y desconcierto en ataque y en defensa que le viene caracterizando en los últimos encuentros, aunque en esta ocasión con el posible atenuante del tormentoso viaje sufrido. Melilla dominó a placer el choque hasta los últimos dos minutos del segundo cuarto con Franch marcando el ritmo de partido y sacando a Vidal del mismo, con una dirección absolutamente desconcertante del uruguayo,y con un absoluto dominio interior tanto en lo que se refiere al rebote en ambos aros, como a la productividad ofensiva, primero con Dos Anjos y en la rotación de Balaban. Todo ello aderezado con minutos de inspiración en el triple y con un Agada imperial en el aspecto físico y que no encontraba oposición en la defensa cobista para anotar con fluidez en rápidas transiciones, al mismo tiempo que aplicaba una importante labor de desgaste sobre Ott.
Melilla era superior en todo y el COB tardó 3.30 en anotar su primera canasta, mientras sufría por su falta de referencias ofensivas con hasta un 0/5 en triples, con Rozitis impotente y desacertado y en general falto de tensión, estando siempre un punto por detrás de los melillenses en cada acción. Lo mejor para los de Gonzalo García es que Melilla parecía que podría empezar a romper el partido con diferencias superiores a los 10 puntos, alcanzando una máxima de 14 puntos (27-13) tras dos triples consecutivas locales en el comienzo del segundo cuarto, mermaba su poderío con las rotaciones, salvo en la zona con el dúo Dos Anjos?Balaban que seguía imponiendo su ley y las pérdidas de balón fueron dando vida al COB, consiguiendo anotar en transición ante sus dificultades para hacerlo en ataque estático contra la zona impuesta por Alcoba. La aparición de Zamora, con 8 puntos y los dos últimos minutos antes del descanso de Pepo Vidal, sirvieron para que el equipo llegase vivo al descanso (37-34) y con mejores sensaciones.
Lesión de Pepo Vidal
El comienzo del tercer cuarto no pudo ser peor para el COB con un triple de Agada y la lesión en una entrada a canasta de Pepo Vidal en un tobillo que le impidió volver a la pista. Un contratiempo importante a sumar más a todos los sufridos, pero que no impidió que gracias a los recursos tácticos defensivos de Gonzalo García de Vitoria, el liderazgo de Zamora y Ott en ataque y la clara mejoría en el rebote ofensivo, que el equipo luchase por la victoria hasta el último minuto. Incluso logró ponerse por delante en varias ocasiones en el último cuarto con ventajas de un punto. Sin embargo la nula rotación en el base y el sobreesfuerzo al que se tuvieron que someter Zamora y Ott en las labores ofensivas, acabó pasando factura, siendo clave de nuevo la falta de capacidad reboteadora defensiva del colectivo en general y de Rozitis en particular, que con un rebote que se dejó coger a falta de 40 segundos, concediendo dos puntos a Dos Anjos, puso la puntilla al meritorio partido cobista.
?Franch (8), Agada (13), Gilling (5), Vucetic (10), Dos Anjos (13) ? cinco inicial- Marín (2), Urtasun (7), Balaban (8), Rubio, Kalinicenko (3).
?
Pepo Vidal (8), Ott (11), Sergio Rodríguez (6), Van Wijk (2), Rozitis (10) ? cinco inicial- Masters (6), Zamora (15), Muratovic, Watson (6)
Parciales por cuarto: 21-13, 16-21, 31-21, 10-14.
Árbitros: Alcaraz Moreno, Caamaño Muñoz y Sánchez Cutillas.
Incidencias: Pabellón Javier Imbroda. 500 espectadores.