Las mujeres consumen con mayor frecuencia el séptimo arte en las salas de la provincia
10 mar 2019 . Actualizado a las 10:13 h.Todo parecía indicar que la bajada del IVA aplicado al cine, desde el 21 % anterior al 10 % al que se redujo en el 2018, habría de influir de alguna manera a la hora de valorar la afluencia de espectadores ourensanos a las salas. No ha sido así, y a pesar de dicha reducción, solo el 15 % van al cine de forma frecuente. Según un barómetro realizado por Sondaxe para La Voz de Galicia, de ese 15 %, el 3,2 % acude prácticamente de manera semanal, siendo en su mayoría mujeres -más del 80 % de ese porcentaje-.
En cuanto a la media de edad del espectador, las personas de entre 30 y 44 años son las más consumidoras del séptimo arte. Mientras que, por el contrario, el sector de jubilados evita pagar por ver películas, y eso que en su caso cuentan con un descuento a mayores en el precio de la entrada.
En cuestión de localidades, la población que vive en zonas con menos de 5.000 habitantes son los que menos visitan las salas. En este punto cabe recordar la importancia de cines situados en municipios como A Rúa o Leiro, cuyas poblaciones oscilan los 4.500 y los 2.000 habitantes respectivamente y aún así, no son suficientes para recaudar un mínimo de espectadores semanales. La capital tampoco se queda corta, en torno al 33 % de las personas que viven en Ourense ciudad, afirman que nunca van al cine y eso que cuentan con la variedad de ocho salas distintas.
Las personas con rentas superiores a 6.000 € son las que menos consumen
Llama la atención dentro del barómetro realizado por Sondaxe en enero de este año, que hasta el 65 % de las personas que tienen nóminas de más de 6.000 euros al mes, han contestado que van al cine con poca frecuencia. Otro 35 % de personas con el mismo sueldo aseguran que no van nunca. Resulta curioso que el precio sea un factor decisivo a la hora de ir al cine, y sin embargo sean los ourensanos con mayor poder adquisitivo los que menos visitan las salas del Ponte Vella.
«Hemos viajado a Vigo o Santiago para ver películas que aquí no se estrenaron»
Para el consumidor general ourensano, el precio es el principal obstáculo con el que se encuentra a la hora de valorar su asistencia al cine, la entrada cuesta 6,50 euros cualquier día de la semana frente a los 4,50 euros que hay que pagar el día del espectador -los miércoles-. Bien es cierto que hay películas, como la oscarizada Bohemian Rhapsody, con las que es indiferente que sea lunes, miércoles o sábado, ya que se siguen consumiendo indistintamente desde su estreno, el pasado diciembre. Esto ocurre tan solo con uno o dos films al año, los demás se pelean por sobrevivir en cartelera gracias a la afluencia incrementada los miércoles. Ni sábados, ni festivos, a los consumidores de multicine les interesa el ahorro en muchísima mayor medida que el tiempo libre disponible. Desde cinéfilos que van al cine una vez por semana, hasta consumidores ocasionales de una vez al mes; todos optan por este día para acudir a las salas. «Solo voy al cine los miércoles porque el precio es rebajado, si hiciesen estas ofertas más días vendría más», explica Alma Seoane, espectadora asidua. Por su parte, Felipe López que acude exclusivamente los miércoles, propone incentivar la afluencia a las salas a través de promociones como la combinación de entrada más cena.
No solo el precio es un impedimento, el público también reclama mayor actualidad en cuanto a los estrenos. Patricia Solla e Iván Carnoto, cuentan: «Hemos viajado a Vigo o a Santiago para ver allí películas que no se estrenaron en Ourense». Otra consumidora, Isabel Bello reclama: «Hay que traer más cine español»
Aún así, destacan dos factores que influyen notablemente en el incremento del consumo. El estreno de determinadas películas infantiles, con las que padres y niños llenan las primeras sesiones de los sábados por la tarde, y el mal tiempo en domingos o festivos, en los que al público ourensano le apetece más disfrutar de hora y media de tranquilidad y buena temperatura hipnotizados por el séptimo arte.