«Lo que tiene que ver con caca o pis no se cuenta; sigue siendo tabú»

F. Ulloa OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Santi M. Amil

En Ourense hay ochocientas personas con ostomía

20 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Solo durante el pasado año, 176 personas se sometieron a una resección intestinal en el CHUO que obligó a practicar una ostomía para colocarles una bolsa a través de la cual eliminan la orina o las heces. Muchos llegan a esa intervención a raíz de procesos oncológicos, fundamentalmente por cáncer de colon, recto, ano o vejiga. «Para ellos, que antes podían no tener ningún síntoma o problema que les limitase en el día a día o les implicase discapacidad a nivel social, la ostomía puede resultarles difícil de asumir; pero para mí y los que tienen mi problema, la bolsa es una liberación», dice Igone Plágaro Álvarez tiene colitis ulcerosa y convive con la bolsa desde que la operaron en 2003. Tenía entonces 27 años; hoy, con 43, está encantada de haberse decidido a la intervención. «No hay que tenerle miedo; a mí me cambió la vida para bien. Ha supuesto poder viajar, poder tener hijos, poder tener una vida en definitiva, porque yo hago de todo, incluso ir a la piscina o la playa porque, en contra de lo que la gente cree, no se nota tanto como se pudiera pensar», explica esta maestra en activo. De la misma opinión es Manuel Castro que también lleva cuatro años ostomizado y, aunque en su caso no ha podido reintegrarse a su trabajo «estoy encantado porque yo ahora tengo vida; antes no salía de casa», matiza. Ambos opinan que parte de culpa del desconocimiento social sobre las necesidades del colectivo está en los propios ostomizados. «Es una enfermedad en la que todavía existen tabúes», concuerdan. «Todo el mundo cuenta que ha tenido un infarto o cualquier otro tipo de dolencias, pero todo lo que tiene que ver con cacas o pis, no se cuenta», dice señala Igone Plágaro. Ella, que es además secretaria de la asociación desde que se fundó. Ayer ella era la encargada de expresar en voz alta el agradecimiento a todos los implicados en el diseño de ese baño especial «porque la verdad es que yo ni mi planteaba que pudiera hacerse; te acabas apañando como puedes con lo que hay, haciendo un poco de contorsionismo a veces porque es cierto que cambiar la bolsa en un baño normal, es complicado», dice.