Un triple a tablero de Pepo Vidal resolvió la contienda de los ourensanos en el Pumarín: 78-81
02 feb 2019 . Actualizado a las 23:58 h.El COB también puso una pica en el Pumarín y se impuso en un partido extraño, que culminó con un golpe de fortuna en el último segundo de partido, a través del triple contra tablero de Pepo Vidal: 78-81
El equipo de Gonzalo García de Vitoria se sobrepuso a un mal partido, uno más de Pepo Vidal, a pesar de ser el héroe con la canasta final; el peor partido de Watson, que nunca estuvo metido en él; la falta de anotación de Zamora hasta el último cuarto y los momentos clave, dos incluso críticos, tras un parcial de 26-4 que propició que Oviedo dominase a placer el choque (44-28). Y aún faltaba un último cuarto para olvidar en ataque, cuando solo anotó cuatro canastas en juego, tres de ellas triples y una en los ocho primeros minutos. Datos que revelan el extraño partido que se vio en el Pumarín, entre dos de los equipos con mejor racha de la categoría y que el COB tuvo controlado mientras se mostró sólido en defensa, Rozitis comenzó su dominio en la zona, Ott ofrecía un recital en todas las facetas del juego, Van Wijk también revivió su mejor versión y salvo Pepo Vidal, que permitía que Ahonen se luciese, el equipo incluido Sergio Rodríguez, que regresaba, mostrase un buen tono.
Pero cuando se olvidó de defender, Oviedo sacó el fusil exterior y consiguió ocho casi de forma consecutiva, con Llorente y Geks como principales referencias para dejar sentenciado el choque con 16 puntos de ventaja a 4:28 para el descanso, de no ser porque Ott comenzó a ejercer de líder y Masters fue la pieza clave que revolucionó el choque por su intensidad y comenzó un parcial que permitió llegar al descanso con solo tres de desventaja (46-43).
El parcial del COB fue 4-25 hasta conseguir ponerse con una máxima de cinco puntos (48-53) en una salida tras descanso impresionante. Rozitis fue amo y señor del tercer cuarto y todo parecía encaminado a una victoria cobista, aunque le faltó sentenciar. Los fallos en los tiros libres de Watson, las malas decisiones en ataque contra la zona planteada por Oviedo y nuevamente el agujero defensivo de Pepo Vidal dejaron todo abierto para el último cuarto. Donde el partido se ganó por trabajo defensivo porque hasta los dos últimos minutos el COB ofreció un manual de despropósitos ofensivos viviendo con un triple inicial de Van Wijk. Se agarró al choque desde la defensa y Oviedo pasó a vivir de su juego interior cuando desapareció su acierto exterior. Una antideportiva a Spieth fue el principio del fin de los ovetenses que pasaron de tener casi sentenciado el choque (74-69) a terminar perdiéndolo con la sobriedad de Ott, un robo clave de Rozitis sobre Arteaga y dos triples finales de Zamora y el de Vidal sobre la bocina, contra tablero, que pasa a la historia del club en una temporada que parece no tener techo para el equipo.
OVIEDO (78): Ahonen (9), Geks (14), Meana (5), Jakstas (13), Arteaga (16) ?quinteto inicial?, Víctor Pérez, Sergio Llorente (9), Van Zegeren (7), Rosa (3), Spieth (2).
COB (81): Pepo Vidal (13), Ott (16), Sergio Rodríguez (2), Van Wijk (15), Rozitis (12) ?quinteto inicial?, Masters (10), Zamora (11), Pluta, Muratovic, Watson (2).
Parciales por cuartos: 21-24, 25-19, 19-23, 13-15.
Árbitros: Sacristán Barazón, Cañigueral Novella y Caamaño Muñoz. Eliminaron por doble antideportiva a Spieth (min. 37).
Incidencias: Pumarín. Unos 1.000 espectadores.