Los fichajes de finales de 2017 salvaron al equipo del descenso a LEB Plata y ahora lo tienen en posiciones de ascenso
03 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Han pasado 365 días y el COB ha sufrido una metamorfosis deportiva digna de un análisis profundo, pasando de estar prácticamente descendido a la LEB Plata a luchar por los play off de ascenso a la ACB con más de media permanencia en la LEB Oro garantizada. Un logro en el que el común denominador tiene nombre y apellidos, Jhornan Zamora, el escolta venezolano que cambió la fisonomía de un equipo perdedor y sin carácter a conseguir que ese mismo grupo pasase de ganar un partido de los quince primeros encuentros de la pasada temporada y ser colista a sumar doce triunfos en las 19 últimas jornadas, con balance de 11 victorias y una derrota en los primeros doce partidos que disputó. Incluso coqueteando con el play off de ascenso, algo por lo que lo ha luchando en la presente temporada.
Zamora fue esa pieza que tanto buscaba Gonzalo García de Vitoria para revitalizar un equipo muerto deportivamente hablando y por el que arriesgó esperando hasta que pudo salir de su club en Chile mientras las derrotas iban hundiendo al equipo y a la afición. Su presencia ante Palma, aquel 30 de diciembre de 2017, cuando asumió la responsabilidad recién llegado en los momentos decisivos para sumar el triunfo fue el pistoletazo de salida para convertirse en el auténtico líder dentro y fuera de la pista de un equipo y para un club que hizo un esfuerzo económico para mantenerlo en la presente temporada.
Sus números lo dicen todo. En los 19 partidos de la pasada temporada promedió 30 minutos de juego, 10,6 puntos, 2,5 rebotes y 3,8 asistencias y en los 13 partidos de la presente temporada todavía sigue mejorando sus números con 16,1 puntos de media, consiguiendo un 43 % de acierto en tiros de dos y tres puntos en los 27 minutos de media que juega y solo con el lunar de su bajo porcentaje en los tiros libres con un 64,9 % de acierto. Es el quinto mejor anotador de la presente temporada y su presencia en la pista es indispensable para el buen rendimiento del equipo en ataque y en defensa destacando su intensidad, valentía, capacidad para liderar al equipo en los momentos delicados y para asumir los tiros decisivos, algo que sin ir más lejos dejó patente nuevamente en la visita a Palencia del pasado domingo, siendo clave en el triunfo cobista.
Aunque fruto de esa análisis, hay un factor más, clave en esta mejoría del equipo, el fichaje de Davis Rozitis, que coincidió en el tiempo con Zamora y que fue determinante la temporada pasada para el equipo y está siendo un pívot dominante en la categoría en la presente.
Rozitis domina bajo los aros
Sus números no dejan lugar a dudas. Pasó de promediar 11,2 puntos y 8 rebotes a firmar la presente campaña 12,1 puntos y 9,7 rebotes, siendo el tercer mejor reboteador de la categoría, el mejor en rebotes ofensivos y el tercer mejor en defensivos. Todo ello completado con 2 tapones de media por partido lo que le lleva a ser el cuarto jugador más valorado de la categoría. El fichaje del dúo Zamora-Rozitis cambió deportivamente al COB.