Los voluntarios de Franciscanas recogieron envases de plástico y colillas alrededor de las pozas
08 oct 2018 . Actualizado a las 10:22 h.Con el inicio del nuevo curso, los ecovigilantes de Franciscanas han vuelto a la carga en su lucha por la conservación del medio ambiente ourensano.
En esta ocasión aprovecharon la soleada mañana para recoger desperdicios de una de las zonas más visitadas por los turistas -uno de los emblemas de la ciudad- y por las que más común es encontrarse restos contaminantes.
Los voluntarios del colegio ourensano, limpiaron el margen del río Miño y sus inmediaciones por el tramo que discurre entre las pozas do Muíño y la pasarela de Outariz y disfrutaron de su particular ecosistema dándose un baño como recompensa a la labor desempeñada.
La actividad está enmarcada dentro del proyecto de Voz Natura -desarrollado por la Fundación Santiago Rey Fernández-Latorre- que promueve las buenas prácticas y el conocimiento del medio ambiente entre los escolares de toda Galicia.
Con su vuelta al voluntariado y el descenso de turistas, el Miño respira un poco mejor. Entre los residuos que sustrajeron se encuentran envases de plástico -hasta quince kilos de envoltorios de este tipo-, vidrio y colillas -casi cuatro botellas de agua que emplean como «cabichómetros», llenas-.
Voz Natura cuenta con el apoyo de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas, la Deputación de A Coruña, la Fundación Alcoa, El Corte Inglés, la Fundación Ramón Areces y la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente.