El número de turistas en agosto ha sido este año el mejor desde el 2008

Marta Vázquez Fernández
marta vázquez OURENSE / LA VOZ

OURENSE

MIGUEL VILLAR

En la federación de hostelería ven bueno el dato, «pero no tanto como esperábamos»

25 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La provincia de Ourense escala poco a poco puestos en su camino a convertirse en destino turístico de primer nivel. Aunque el territorio se encuentra aún muy lejos de lograr los resultados de las otras tres provincias gallegas, todas costeras, lo cierto es que pasito a pasito sigue mejorando sus propios registros. El pasado mes de agosto, por ejemplo, fue el mejor de los últimos años.

Así lo evidencian los datos del Instituto Nacional de Estadística, que ayer mismo publicó el informe de ocupación hotelera relativo al octavo mes del año. Según eso, en ese tiempo llegaron a la provincia 40.733 viajeros, lo que supone un incremento de casi un 2 % respecto al dato recogido en agosto del 2017. Si se echa la vista más atrás, resulta que son cinco mil turistas más que los que llegaron a la provincia en 2008.

Así las cosas, Ourense ha recibido ya desde el mes de enero a 221.429 visitantes, situándose la estancia media en 1,99 días. De nuevo, el dato está lejos de los de otras provincias y el sector ve con recelo este dato.

«No estamos logrando incrementar la estancia media y eso es algo que nos preocupa», reconocía ayer mismo Ovidio Fernández Ojea, presidente de la federación gallega de hosteleros, que también valoraba con prudencia el incremento en el número de turistas registrado en el mes de agosto. «Ha sido un resultado bueno, sin duda, pero no tan positivo como el que nosotros esperábamos», reconocía, lamentando que los registros de Ourense estén todavía muy lejanos a los de las otras provincias gallegas.

Ser más «atractivos»

Así, en el mes de agosto a Lugo llegaron 85.187 turistas, mientras que en el caso de Pontevedra la cifra se disparó ya hasta los 240.833. A Coruña logró superar ese número, alcanzando los 267.370 visitantes. A juicio de Fernández Ojea esos resultados ponen en perspectiva los que se recogieron en la provincia de Ourense, por lo que no debe haber demasiados optimismos. «Somos los últimos de la cola a la hora de recibir gente y a pesar de que la provincia está cuidando su actividad turística, hay que ser más atractivos para los visitantes extranjeros y también lograr que se queden más tiempo», dice.

Y es que los datos dejan claro que para los visitantes foráneos conocer Ourense no es una prioridad. Así, en el mes de agosto fueron 5.835 los extranjeros que pasaron al menos una noche de hotel en la provincia. Los españoles alojados fueron 34.897.

Mejor infraestructura

Para el sector, y dado que Ourense no es destino de playa, es importante también trabajar para desestacionalizar el turismo. «Hay que apostar por los doce meses del año», afirma Ojea, que atribuye parte de los buenos datos de agosto al turismo de «raíces», en referencia a las fiestas familiares y de los pueblos, que también llenan habitaciones fuera de la capital.

De cara al futuro, Ojea cree que es necesario trabajar con vistas a la llegada del AVE que, si no hay más retrasos, estará operativo entre Ourense y la capital de España a finales del año 2019. «Nos jugamos el futuro y la estabilidad de la provincia con esto, y hace falta un esfuerzo de toda la sociedad». Concreta el presidente de la federación de hosteleros que, ahora mismo, «no estamos en condiciones para ser altamente competitivos para cuando llegue el tren de alta velocidad», por la ausencia de una infraestructura hotelera mejor.

Recuerda que, sobre todo en el caso de la capital, la ausencia de un plan urbanístico está haciendo «un daño gravísimo al sector», ya que impide que lleguen nuevas construcciones, con las que se incrementarían las plazas y los servicios, por ejemplo enfocados al turismo de congresos.

La provincia tiene abiertos 181 hoteles, menos que los que operaban hace diez años

A pesar de que el número de viajeros se ha incrementado en la provincia en los últimos diez años, lo cierto es que la estructura del sector ha ido a menos en la última década. Así, hace 10 años al cierre del mes de agosto operaban en la provincia 190 hoteles de distinta categoría, mientras que hoy ese número se ha reducido hasta los 181. A pesar de que la diferencia no es grande, podría indicar que, pese a esas cifras positivas, el sector no es todavía todo lo rentable que se podría desear y no alienta, por ello, las nuevas inversiones. Es destacable que la provincia llegó a contar con 205 establecimientos abiertos al público en 2013, alcanzando así su pico más alto. Después, con la crisis, muchos tuvieron que cerrar.

Tampoco es demasiado significativo el peso que tiene el sector hotelero como motor de empleo, ya que el número de trabajadores que prestan servicio es de 737 personas, una cifra que también está por debajo de la que había hace una década. En la provincia de Lugo son 1.204 los trabajadores en los hoteles, mientras que en Pontevedra hay más de cuatro mil.

Cuatro de cada diez, gallegos

Y respecto a la procedencia de los turistas, siguen siendo los vecinos de otras provincias los que más llenan los hoteles ourensanos ya que suponen cuatro de cada diez de las visitas contabilizadas. Madrid es la segunda comunidad autónoma que más viajeros aporta a Ourense, con otro 23 %, mientras que el resto de turistas se reparte entre regiones como Asturias, País Vasco, Cataluña Andalucía.