Los jubilados agotan las casi 30.000 plazas asignadas por el Imserso

Marta Vázquez Fernández
m. vázquez OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Santi M. Amil

Colas de hasta dos horas en las agencias de la provincia para reservar viajes

19 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Las agencias de viajes de la provincia de Ourense han vivido días de mucho ajetreo. La apertura del plazo para la reserva de vacantes para los viajes del Imserso, que en Galicia ha tenido lugar entre el 14 y el 17 de septiembre, se ha vivido este año con especial intensidad debido al incremento de la demanda por parte de los jubilados. Así, los mayores han protagonizado largas colas en las puertas de las distintas sedes repartidas en distintos municipios -casi medio centenar- con el deseo de poder optar a su destino favorito.

Pero no todos los han logrado. El incremento en el número de demandantes constatado este año y el recorte de plazas, según aseguran desde las propias agencias, ha provocado que los destinos más deseados, sobre todo Benidorm, se agotaran en las primeras horas de plazo. A estas alturas -ahora ya solo queda que quienes reservaron su viaje hagan el primer pago antes de que transcurran tres días hábiles-, ya casi se han agotado las cerca de 30.000 vacantes que se habían asignado para los jubilados acreditados por el Instituto de Mayores y Servicios Sociales en la provincia ourensana.

«Hay plazas para todos, pero la verdad es que todo el mundo quiere Benidorm o la Costa del Sol, y eso es imposible», confirma Fernando Olmedo, director de la oficina de la calle Bedoya de Halcón Viajes, en la capital. En los tres días de plazo en ese establecimiento se han vendido 900 plazas, una cifra superior a la de años anteriores. «Este año la demanda nos ha desbordado, hemos vivido larguísimas jornadas de trabajo porque las normas de la Administración establecen que solo haya tres días para reservar y el mismo tiempo para hacer el pago, por eso se han registrado tantas colas y tan largos tiempos de espera», confirma. Asegura que el trabajo en las agencias es complicado porque los clientes primero quieren tener información sobre las vacantes que existen y las fechas de viaje, para poder escoger. «Es un proceso largo y tal vez sería conveniente que diesen un poco más de tiempo, para evitar esta saturación», dice Olmedo.

En cuanto al procedimiento, es el propio Imserso el que informa al beneficiario de este tipo de viajes sobre la fecha en la que debe presentarse en la agencia de viajes, lo que provoca que los que acuden el primer día tengan muchas más opciones de viajar al destino deseado que los que son llamados para el último. «Desconocemos el criterio pero así funciona, y provoca que los que vienen en la segunda fase ya no lleguen a los mejores destinos», dice.

Con todo, esto no resta el interés de los ourensanos por desplazarse y si en un destino no hay vacantes, escogen otro. «Cataluña es siempre el lugar al que nadie quiere ir, pero a estas alturas ya se han completado también todas las plazas que había en distintos puntos de esa comunidad», constata Olmedo.

Tras este trasiego en las oficinas de viajes, los jubilados que hayan reservado y pagado el primer plazo de su viaje -o en su totalidad en caso de que se desplacen en octubre o noviembre- deberán esperar a que llegue su momento de partir.

Los más madrugadores lo harán a partir de octubre pero la temporada alta para este tipo de desplazamientos llegará en marzo y abril, meses en los que se registra la mayor demanda por parte de los mayores ourensanos, que prefieren esperar a la primavera para disfrutar de un viaje que les saldrá a un precio muy atractivo. Un ejemplo: dos semanas en Benidorm cuestan 378 euros por persona. Esa cantidad incluye todos los desplazamientos, hotel y pensión completa.

«Los más animados viajan hasta cinco veces en la misma temporada»

«Cada provincia tiene su cuota, pero cada persona puede ir más de una vez en una temporada», asegura Carmen Vázquez, de la agencia Viaxes Piña, donde también se han vivido estos días largas jornadas de trabajo para atender la avalancha de mayores en busca de una plaza para irse de vacaciones en los próximos meses. «Mientras queden vacantes se pueden ir apuntando y los más animados viajan hasta cinco veces, empiezan en octubre, pasan fuera las Navidades y luego en la primavera vuelven a salir», explica la profesional, que también confirma que destinos como Benidorm o Torremolinos son los favoritos para los demandantes ourensanos.

Asimismo, ha visto como en los últimos años se ha ido registrando un incremento en la demanda para estos viajes, que se ofertan desde hace más de tres décadas en un intento de la administración estatal para darle vida al sector hotelero durante la temporada baja. «Cuando empezamos con esto había mucha menos gente. Ahora se nota que la calidad de vida ha mejorado, la gente tiene más ganas de salir», explica Carmen Vázquez. Aunque los destinatarios son los mayores de 65 años, hay excepciones que reducen ese límite. Un viudo, por ejemplo, puede participar tras haber cumplido los 55.