En la provincia se detectan cada año 340 nuevos casos de este tipo de cáncer
15 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Hoy se celebra el Día Europeo de la Salud Prostática, un tema nada baladí teniendo en cuenta el envejecimiento poblacional de la provincia, ya que la edad es un factor determinante en el desarrollo de la hiperplasia prostática benigna. Esta patología es la más frecuente en las consultas de los diez especialistas que conforman el servicio de Urología del CHUO. «Tenemos una ingente cantidad de pacientes, y solo llegan a la consulta cuando la hiperplasia prostática les molesta, porque que aumente el tamaño de la próstata no es una enfermedad en sí misma, es el proceso normal de envejecimiento, y lo que es importante es tratar los síntomas que provoca», matiza el jefe del servicio, Dionisio López Bellido. Hoy existen múltiples tratamientos para eliminar esas molestias y solo en los casos más extremos -un 10 % del total- se recurre a la cirugía prostática desobstructiva. En el CHUO se aplican todas las técnicas que existen de este tipo de intervenciones quirúrgicas, desde la resección transuretral, como la resección por láser, la cirugía abierta y la laparoscópica.
En los últimos años la media de edad de quienes acuden por esta causa a consulta se ha reducido. Algo que los urólogos consideran muy positivo y que se achaca tanto al mayor interés de los varones como, fundamentalmente, a la labor de Atención Primaria. «Se ha producido un cambio fundamental. Esto ha pasado de ser algo de lo que no se hablaba, ni se trataba, ni se preguntaba, a algo que está asumido. Los hombres ya saben que tienen que mirárselo a partir de los 50 años y en los centros de salud la implicación y el control sobre la patología son máximos. Ahora mismo puede llegar tarde algún caso aislado que no haya pasado por su médico de cabecera», señala Bellido.
De hecho, cada año se piden y realizan en Ourense el doble de análisis de PSA -una de las pruebas diagnósticas habituales- que hombres hay en la provincia.
Esta mayor concienciación de los varones, la implicación de Atención Primaria y el mayor número de análisis de este marcador del antígeno prostático específico, han llevado no solo a mejorar la calidad de vida de las personas con patología benigna, sino también a avanzar en la detección precoz del cáncer de próstata. No tanto porque el PSA pueda considerarse una herramienta fiable para detectarlo «porque no hay una cifra que pueda considerarse normal, ya que desde una infección de orina a una piedra en el riñón o incluso un tacto rectal pueden aumentar ese PSA y sin embargo son patologías benignas», señala el jefe del servicio. Pero ese indicador es un factor que, unido a otros, lleva a los especialistas a realizar una biopsia de próstata, que sí es una prueba concluyente para en el diagnóstico de tumores cancerígenos en esta parte del cuerpo.
Ourense es el área sanitaria de Galicia que más pruebas de este tipo realiza: en torno a un millar al año, lo que supone una media de entre 12 y 15 al día. Esa actividad ha permitido detectar mucho más precozmente los tumores. «En los últimos cinco años nos mantenemos entre un 33 y un 35 % de diagnósticos de cáncer de próstata», matiza Bellido.
Esta prueba se realiza en quirófanos de cirugía mayor ambulatoria y no requiere de ingreso previo ni posterior del paciente. Además, la evolución tecnológica ha hecho posible una considerable reducción de riegos y molestias, aunque no deja de ser una prueba invasiva por lo que no se recomienda realizarla con carácter preventivo o para un cribado general entre población en principio sana como se hace, por ejemplo, con la mamografía para el programa de detección del cáncer de mama en las mujeres.