El parón en la fabricación amenaza el empleo local en el sector de automoción

Marta Vázquez Fernández
marta vázquez OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Agostiño Iglesias

Las empresas prescinden de los contratados eventuales y algunas barajan despidos

09 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El sector del automóvil vive momentos de incertidumbre. La drástica reducción de ventas en los vehículos diésel durante los últimos meses y la reciente entrada en vigor de la nueva normativa de emisiones para la homologación de vehículos nuevos en la Unión Europea está teniendo efectos en la producción de nuevos modelos en las grandes fábricas. Muchas han optado en los últimos días por reducir la producción diaria de vehículos, y aunque se trata de una medida que parece ser temporal, ya está teniendo sus efectos en las empresas que fabrican componentes de automoción.

Y Ourense no es ajena a esta situación. Varias empresas del sector han tenido en los últimos días que parar líneas de producción, concediendo permisos a los trabajadores en plantilla y prescindiendo de los contratados eventuales a los que suele recurrirse en momentos de alta demanda. No se han producido despidos por ahora pero en algunas empresas no se descarta llegar a esta medida si la falta de pedidos se mantiene.

Faurecia, Möller Tech, Inplasor o Incalplas son algunas de las firmas ourensanas que se están viendo afectadas por la situación. «Esta semana ha habido varias líneas de producción paradas y se ha invitado a los trabajadores a coger días de vacaciones», explica Roberto Garrido, responsable de la sección de automoción del sindicato Comisiones Obreras, que confirma además que para amortiguar el golpe las empresas están prescindiendo de los eventuales.

El origen de gran parte de esta situación está en la decisión de PSA de reducir de 300 a 100 su producción diaria de coches, alegando la falta de cajas de cambio, explican desde el sindicato. «En estas empresas se trabaja bajo demanda y en situaciones como la que se está viviendo ahora lo que se hace es ajustar la plantilla», explica Garrido, que confirma que en algunas de las fábricas más grandes, caso de Faurecia, ya se habla de hacer despidos si esta situación se prolonga en el tiempo. En estos momentos la firma, con un alto porcentaje de pedidos procedentes del fabricante francés, no descarta despedir a diez trabajadores. Su plantilla actual es de 345 personas.

Pero por ahora no hay certeza de que se produzca este desenlace. Todos los proveedores ourensanos están pendientes de las noticias que puedan surgir a lo largo de los próximos días. «Pensamos que en cuanto haya motores gasolina disponibles se recuperará la producción; lo que está claro es que ahora ya nadie quiere fabricar vehículos diésel porque ya existen excedentes muy altos», constata Garrido.

Entre enero y agosto se comercializaron 14 vehículos al día en los concesionarios

A pesar de la situación de incertidumbre que vive el sector por el freno en la compra de modelos con motor diésel y por los cambios en las normativas sobre emisiones, lo cierto es que el año actual está siendo muy positivo en los concesionarios gallegos y también en los ourensanos.

Así, al cierre del mes de agosto en la provincia de Ourense se habían comercializado 3.588 vehículos, un dato que supone una media diaria de 14 turismos o vehículos todo terreno y que representa un incremento del 12 % respecto a la situación un año antes. El repunte es resultado del despegue del mercado de particulares, que en los últimos años había estado algo relajado, pero también del interés de las empresas por renovar sus flotas de automóviles.

En este sentido, en los ocho primeros meses del año los clientes particulares han adquirido un total de 2.307 unidades nuevas en los distintos concesionarios de la provincia, de los que el 10 % corresponden a las comercializaciones firmadas el pasado mes de agosto, especialmente bueno para el sector. En cuanto a las empresas, a ellas se imputa la venta de algo más de un millar de automóviles nuevos entre los meses de enero y agosto.

Actualmente el negocio de la venta de automóviles aglutina en Ourense a diecisiete empresas y 27 marcas. De acuerdo con los datos que maneja el propio sector, son alrededor de cuatrocientos los trabajadores que conforman la plantilla de estas empresas, que en todo el año pasado comercializaron 4.883 vehículos. Este año se espera incrementar ese dato. Y en lo que también se avanza es en la menor emisión de gases contaminantes procedentes del parque móvil ourensano. El 75 % de los nuevos modelos vendidos se encuentran en la gama más baja de emisiones.

El sector es uno de los diez que más ha crecido en valor añadido bruto empresarial en la provincia

La industria no es el principal motor del empleo en la provincia de Ourense pero poco a poco esta actividad empresarial va ganando peso y generando mayor volumen de negocio. Y más allá de la pizarra, una industria con enorme potencial que se sitúa a la cabeza de las exportaciones, la automoción se sitúa como un negocio que en los últimos años ha ido ganando importancia.

Así lo confirma el último informe Ardán, relativo a las empresas de la provincia de Ourense. En el estudio, que analiza la evolución de los negocios con sede social en la provincia durante los últimos 25 años, se pone de manifiesto que el sector de la automoción se encuentra entre los diez que más han incrementado su valor añadido bruto empresarial. Ese repunte se cifra en un 155 %. Además, varias empresas destinadas a la fabricación de componentes para el sector automovilístico se encuentran entre las diez que más crecieron desde 1993 en este mismo capítulo.

Evolución mensual negativa

Pese a todo, la evolución del empleo en el sector industrial no ha sido todo lo positiva que se podría esperar en los últimos meses. De acuerdo con los datos que esta misma semana ha publicado el Ministerio de Empleo, agosto se cerró con 26 desempleados más en esta actividad económica, que suma 2.278 personas sin trabajo. Si las cosas vuelven a la normalidad en las fábricas de automóviles para las que trabajan las empresas ourensanas, es posible que esta situación se revierta a corto o medio plazo.