«Todo el mundo sabe hoy que ponerse el cinturón es sinónimo de seguridad»

Maite Rodríguez Vázquez
maite rodríguez OURENSE / LA VOZ

OURENSE

MIGUEL VILLAR

Aguiar destaca los avances en la concienciación vial pero incide en que hay que «educar y educar»

24 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Con casi treinta años de dedicación a la educación vial, 17 de ellos trabajando en la Jefatura de la DGT en Ourense, Sinda Aguiar (Monte Furado, Lugo, 1957) es una de las mejores conocedoras de cómo nos comportamos los ourensanos en la carretera y de la importancia de la formación desde edades tempranas para inculcar comportamientos cívicos al volante. Son muchas las actividades que en este ámbito se realizan todos los años en centros educativos, asociaciones y con distintos colectivos.

-¿Los programas de la DGT de educación vial se diseñan a nivel nacional o se adaptan en cada jefatura?

-Son directrices que manda Madrid, y se hacen unos materiales. Luego cada provincia puede incidir más en uno o en otro. Aquí, en Ourense, prácticamente todos los programas que se diseñan desde la DGT se llevan a cabo.

-¿Cuáles tienen en marcha?

-Tenemos los de infancia, hasta los doce años, para adolescentes y jóvenes, mayores, para alumnos con necesidades educativas especiales. También sobre hábitos saludables, o dirigidos al usuario de bicicleta, al peatón y al conductor. Prácticamente abarcamos todo. Incluso llegamos hasta las empresas.

-Muchas veces se ha dicho, y que otros países así lo tienen, que sería interesante incluir la educación vial como asignatura en los colegios. ¿Se cubre esa carencia desde la DGT?

-Hay centros que sí lo tienen incluido en el currículo. Pero, si no, se trabaja la educación vial como materia transversal. Yo creo que debería ser una asignatura. Para el próximo curso, la Xunta la va a implantar como de libre designación, dedicada a la movilidad segura y sostenible. Se ofrecerá en primero y segundo de ESO y el alumnado lo podrá elegir en uno u otro curso. Pero la DGT ya actúa desde el principio y a lo largo de la vida. Desde cero actuamos con los padres, en la protección a la madre durante el embarazo o recomendando los sistemas de retención adecuados para el bebé, para que salga del hospital ya protegido en su sillita.

-Y con toda la información, ¿cómo se explica que siga habiendo accidentes?

-La accidentalidad ha bajado muchísimo. Ya no se dan esos casos de niño que iban sin atar o el adulto sin cinturón que se rompían algo en un accidente. Hoy ese tipo de accidentes de que se golpea el niño contra el asiento delantero son la excepción. La mayoría de los padres son muy responsables y participan. También vienen mucho los abuelos a preguntar a la jefatura. Ya no es tanto por la sanción como por la seguridad del niño.

-¿Diría que la educación vial tiene que ver con un mayor desarrollo económico y de poder pagar esos sistemas de seguridad?

-Lo que antes no había era concienciación de que a un niño le podía pasar algo dentro de un vehículo. Yo me crie sin cinturones atrás y no se planteaban que podíamos ir inseguras. Todos nos hemos dado cuenta del peligro que entraña llevar a unos menores en un vehículo sin el debido sistema. Y todo el mundo sabe hoy que ponerse el cinturón es un sinónimo de seguridad. Llegas al coche y lo pones. Es algo interiorizado.

-¿Y lo más difícil de asimilar?

-Ahora mismo, la concienciación de los mayores para que, cuando ya no tengan la capacidad suficiente para conducir, dejen de hacerlo. Que visiten sus centros de reconocimiento y les dirán cómo poner la solución. También preocupa mucho la toma de medicamentos y, en los jóvenes, hay que seguir incidiendo en que la tasa segura de alcohol y drogas es cero.

-¿Cree que realmente funciona más la educación o la sanción?

-No hay otra cosa. Es educar y educar, aunque además hubo que tomar otras medidas. Se ha visto, como en el carné por puntos, que las sanciones también causan efecto.

Muchos colectivos implicados en trabajar en este ámbito

Recientemente se creó en Ourense una subcomisión provincial de educación vial en la que participan la Consellería de Educación, Anpas, Protección Civil, policías locales, inspectores educativos, formadores y sanitarios. El 29 de este mes concluirá el plazo para que los integrantes se apunten a los distintos grupos de trabajo, detalló Sinda Aguiar, quien se congratula de que en Ourense «tenemos la gran suerte de que hay mucha gente trabajando en este ámbito». En la semana de la movilidad, por ejemplo, se llegó a 1.842 usuarios.

«Yo hay centros con los que llevo trabajando 17 años. En este último año 2017 hemos realizado 11.304 intervenciones con distintos usuarios (alumnos de Infantil, Primaria, Secundaria, profesores, padres...). Dependemos de las campañas que la DGT hace cada año, pero también hay otros agentes, no solo la jefatura, como son las policías locales, la Guardia Civil de Tráfico o asociaciones que actúan y con las que colaboramos dando material», describe Aguiar, que agradece la colaboración de todos los grupos que colaboran con las campañas del organismo de tráfico. «Si no, no podríamos hacer educación vial», asegura.

-Recientemente hubo otro fallecimiento de una peatona...

-Como peatones, los mayores a veces cruzamos por donde mejor nos viene. A veces somos impacientes y pensamos que tenemos las mismas facultades y pensamos que nos va a dar tiempo y pasamos y no nos da tiempo. Lo que hay que hacer es educar.

-¿Qué incidencia tiene el uso del móvil?

-Una de las mayores causas de accidentes son las distracciones y conducir haciendo uso de cualquier dispositivo nos distrae. Nuestro psicólogo en la DGT nos recomienda poner diferentes tipos de tonos y usar uno específico si se espera una llamada importante para parar y atenderla.