Alarma entre los patateros de A Limia al recibir siembra certificada en mal estado

sindo martínez VERÍN / LA VOZ

OURENSE

Hay partidas que presentan putrefacción, una de ellas de 12.000 kilos, que son tiradas

08 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Los trabajos de siembra de la cosecha de patata 2018/2019 se van extendiendo en los municipios de la llanura limiana, con una preocupación adicional para los agricultores además del inicio tardío: la llegada de algunas partidas de siembra certificada de fuera de Galicia en mal estado.

Una de esas partidas era de 12.000 kilos. «Se han producido varios casos, de miles de kilos y eso nos molesta. Era siembra certificada del territorio español que llegaba en un estado de putrefacción, lo cual lleva a no poder sementarla», afirmó el presidente de la asociación de productores de patata de A Limia, Amador Díaz Penín. El enfado de los agricultores afectados llevó a la agrupación a reclamar de la administración, tanto autonómica como estatal, «un mayor control a este tubérculo de siembra que pagamos muy caro y que, en ocasiones no llega en las debidas condiciones». Reclaman más inspecciones a los suministradores. El presidente de los patateros recordó que «a nosotros también se nos vigila y en su caso, se nos sanciona con mucho rigor, en cuanto hay alguna siembra en mal estado».

Este agricultor matizó, no obstante, que esos casos puntuales de podredumbre en la variedad agria no comprometen el buen estado de salubridad de la cosecha de patata antelana. «Los consumidores pueden estar tranquilos en ese sentido, no va a haber problemas en el futuro pese a estas partidas que se han tenido que desechar», dijo Díaz Penín, que insistió en que «estos casos puntuales no deben afectar al buen prestigio de nuestro producto en toda España».

Precios al alza

Las altas tasaciones de esa simiente es otra de las tónicas de estos inicios de campaña. La siembra de mejor calidad de la variedad agria se tasa por encima de los 1,5 euros, una cifra algo superior a la de años anteriores. Debido a esto, muchos labradores han optado por utilizar su propia simiente, con patatas de su propia cosecha de años anteriores.

La mejoría del tiempo ha provocado que ya se pueda entrar a trabajar en cientos de parcelas anegadas hasta hace escasas semanas por las lluvias de marzo y abril.