El COB sigue su escalada tras ganar en un final igualado a Lleida

Jacobo Rodríguez

OURENSE

AGENCIA LOF

Los ourensanos ya tienen el «play off» de ascenso a tiro

09 mar 2018 . Actualizado a las 23:30 h.

También ganó en Lleida. Diez victorias de once partidos. Permanencia virtualmente conseguida y con el play off a tiro. Este COB no parece tener límites y gana por sistema pasando de ser el peor conjunto de la categoría a ser el mejor con diferencia de la segunda vuelta. Incluso en partidos igualados y con finales apretados.

Lo mejor de los dos primeros cuartos fue el resultado al descanso, mínima desventaja (37-36) porque el COB fue de más a menos y solo pudo subsistir en el partido por los bajos porcentajes en el tiro ilerdense de tres puntos y la racha de acierto del trío Johnson-Zamora y Kohs. Comenzó bien el equipo de Gonzalo García con variantes y alternativas defensivas desde el salto inicial que sacó de partido a Lleida y con un ataque basado en el pase buscando siempre la mejor opción. Johnson era un referente, Zamora sumaba y Rozitis no era el de siempre, pero barría lo que quedaba en la zona rival y con eso bastaba llegar a mandar con rentas cortas en el marcador hasta que Johnson y Rozitis se fueron al banquillo.

El rebote defensivo era una lacra para los cobistas y solo con la salida de Trist pudo atajar el problema. En el segundo cuarto sufrió el acierto de Dukanovic en el exterior y Karena en la zona, mientras el ataque cobista naufragaba y solo unos minutos inmaculados de Kohs en el tiro, con dos triples y un tiro de dos anotados, lograron salvar el primer momento clave del partido con una desventaja de siete puntos (33-26).

Y para ganar todavía tuvo que sobreponerse a otro momento delicado en el tercer cuarto en el que encajó un parcial de 20-8 con una exhibición ofensiva de Dukanovic en el triple, con tres consecutivos y de nuevo Karena en la zona que volvía a dejar otra vez una desventaja de siete puntos (57-50) a lo que el COB respondió con su mejor arma, la defensa. El equipo ofreció unos últimos doce minutos de partido con un recital defensivo que primero anestesió las dos referencias ilerdenses en ataque y luego le obligó a sumar una sucesión de pérdidas en los minutos finales. Además en el último cuarto el ataque cobista volvió a fluir como en el primer cuarto y la sentencia llegó con tres canastas de Zamora, Johnson y Ahonen.