«Antes del Alvia esta era una estación desértica, ahora hay andenes llenos»

Cándida Andaluz Corujo
cándida andaluz OURENSE / LA VOZ

OURENSE

MIGUEL VILLAR

Los negocios vinculados al tráfico ferroviario detectan un aumento de viajeros

23 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Una de las maneras de saber cómo ha influido el Alvia a Madrid en la manera de desplazarse de los ourensanos y de las personas que visitan la ciudad es conocer la repercusión que tiene en los negocios ligados al transporte ferroviario, aquellos con locales en la misma estación. Quienes mejor lo saben son los que todos los días, desde hace años, ven llegar y salir a los viajeros. Es el caso de José Pérez que, hace 40 años que comenzó a servir en la cafetería de la estación. No lo duda:· «Se ha notado muchísimo». Tenemos que pensar que esta era casi una estación muerta hace unos años», afirma. Y aunque el tráfico de estudiantes y funcionarios de Ourense a Santiago y Coruña (y viceversa) es muy importante, destaca el de los viajeros a Madrid. «En los últimos años, desde que llegó el Avant y, sobre todo, desde que pusieron los trenes Alvia a Madrid, esto creció muchísimo, (se refiere al negocio) sobre todo de gente de Ourense que se marcha a primera hora», dice.

El gremio de los taxis es otro de los afectados. Ana Rúa confirma que el cambio en el tráfico ferroviario a Madrid, con un aumento de horarios, ha sido espectacular. En su caso, son los turistas los que en mayor medida utilizan sus servicios. «La gente se ha ido acostumbrando y coge mucho más el tren. A la mayoría los trasladamos a los hoteles de la ciudad y casi todos nos preguntan por las termas. Ahora en invierno suele ser más turismo de ciudad, aunque en verano muchos preguntan por la Ribeira Sacra y otros lugares de la provincia». En la estación dos señoras llegan en el Avant de A Coruña. Una de ellas afirma que sí utiliza este servicio, aunque afirma que el más usa es el tren a Madrid. «Yo tengo que ir bastantes veces y ahora siempre cojo el tren, vale la pena. Antes era mejor ir por carretera porque había pocos horarios y tardaba muchísimo. Ahora es muy diferente, el cambio ha sido total».

Otros empresarios que desarrollan sus servicios en la estación ourensana son de la misma opinión, aunque no perciban en exceso el aumento de ventas. El propietario del quiosco de prensa situado en el interior de la estación afirma que el trasiego es continuo desde primera hora de la mañana, aunque subraya que lejos quedaron los largos viajes de lectura en papel y que ahora la mayoría ya lleva un móvil o un tablet en la que consultar y leer noticias. De la misma opinión es el vendedor del estanco. «Sí que se ve mucha más gente, pero ahora no se puede fumar dentro, por lo que las ventas son parecidas», subraya.

Además de los turistas y estudiantes, otros usuarios cada vez más recurrentes de los trenes entre y hacia Madrid son los empresarios. Tanto los que se desplazan desde la ciudad de As Burgas como los que llegan. Mónica Seijo Fernández, de Europcar, empresa de alquiler de coches, cuenta que el cambio ha sido asombroso desde que los viajes son más cortos y las frecuencias mayores. «Antes del Alvia esta era una estación desértica, ahora hay andenes llenos. Menos cuando estaba el tren de Barcelona, que siempre funcionó muy bien». Y para ejemplificar de qué manera, afirma que es la casi la única oficina de la empresa que no ha notado una bajada en los últimos años, sino un alza. El crecimiento ha venido, sobre todo, por la gente de Madrid: «Se nota que hay más gente de empresa que viene en tren y que nos alquila el coche para ir al polígono. También había gente que antes iba en avión a Vigo y cogía allí el coche para venir a Ourense y ahora vienen directos en el tren y alquilan aquí», relata. Y recuerda que hace años era totalmente diferente. «Ahora les compensa más venir en tren. Se ve mucha más gente, sobre todo los fines de semana, en concreto el domingo a las nueve de la noche, cuando sale el último para Madrid. Es una locura», dice. Trabaja desde hace 17 años en la estación y afirma que el aumento de turistas ha sido grande. «También hay muchos más visitantes que llegan en tren. Mucha gente que, aunque no alquile un coche, entre en la oficina y nos viene a preguntar sobre donde están las termas y cómo llegan».

Fomento augura que a finales de este año el viaje a Madrid se acortará 40 minutos

La inauguración del tramo entre Olmedo (Valladolid) y Zamora hace ahora algo más de dos años permitió recortar el viaje entre las principales ciudades gallegas y Madrid en unos 30 minutos. Un tiempo que según el Ministerio de Fomento se acortará más este año. El primer ahorro se producirá a partir de abril, cuando esté en funcionamiento el sistema ERTMS en los 99 kilómetros entre Olmedo y la capital zamorana. El sistema que monitoriza en todo momento la marcha del tren permitirá elevar la velocidad de los Alvia de 200 a 250 kilómetros a la hora, lo que se traducirá en 10 minutos menos de viaje.

La puesta en servicio del tramo entre los municipios de Zamora y Pedralba de la Pradería, previsto para finales del 2018, será el otro momento importante. El cambiador de ancho de la segunda localidad ya está en fase de obras y los trabajos en la plataforma, terminadas en todo el trazado, a excepción de los recorridos entre Zamora y La Hiniesta y entre Cernadilla y Pedralba. Su apertura al tráfico ferroviario supondrá un ahorro de tiempo de una media hora.

Cuatro horas y 27 minutos

En la actualidad, el recorrido más corto en tiempo entre Ourense y Madrid es cuatro horas y 27 minutos. Corresponde a los Alvia que salen de Ourense a las 15.55 horas; aunque el de las 5.55 de la mañana, tarde un minuto más. El camino de vuelta se hace más corto si se elige el que parte de Madrid a las 9. 15 horas, que llega a la ciudad de As Burgas, cuatro horas y 17 minutos después. Nada que ver con el larga y media distancia que sale a las 11.10 horas de Ourense y llega a la capital de España más de diez horas después, el doble que el Alvia. Eso sí, con muchas más paradas por el camino.