La Fundación Reverter recuerda el debut de Lalao en Montecarlo

Luis Manuel Rodríguez González
luis m. rodríguez OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Santi M. Amil

El carismático piloto ourensano llegó a Mónaco en 1958

27 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde la Fundación Estanislao Reverter han hecho hincapié en una de las fechas clave de la brillante trayectoria del piloto, ya que mañana se cumplirán sesenta años del día en que finalizó su primera participación en el mítico Rallye de Montecarlo.

Aquella edición de 1958 venía de un año en blanco, ya que la prueba nacida en 1911 no se disputó en 1957, debido a la Guerra del Sinaí, producto de la crisis del Canal de Suez, que implicó a los galos en coalición con el Reino Unido e Israel. Arrancó un 21 de enero y se prolongó durante ocho días de dura competición, en la cual Reverter Sequeiros compitió junto a su hermano Toñín, a los mandos de un Dyna Panhard Z1, automóvil francés con carrocería de aluminio y acero, que montó una mecánica con 850 centímetros cúbicos y 50 caballos.

En el caso de los hermanos Reverter, su partida tuvo lugar en Lisboa, el día 22, para enfrentarse a un recorrido de 2.850 kilómetros con una media impuesta nunca superior a los 73 kilómetros por hora, ni inferior a los 60, con lo que era muy complicado cumplirla, así que se pasaron prácticamente dos días sin dormir. Lalao y Toñin no pudieron clasificarse para la etapa complementaria, debido a una rotura de los amortiguadores traseros, cuando estaban a 800 kilómetros de Mónaco. Aunque a la postre llegaron, hicieron fuera de control.

Aquella carrera del año 1958 fue especialmente dura a causa de la nieve, el hielo y las bajas temperaturas, lo que provocó que de un total de 303 vehículos que tomaron la salida tan solo consiguieron finalizar 28, lo que representó una criba importante.

Ese Rallye de Montecarlo fue ganado por el francés Guy Monraisse, acompañado de Jacques Feret en un Renault Dauphine. En la fundación guardan algunas de las imágenes de aquella aventura de los Reverter incluida la que da cuenta de su desgaste físico al final de una disputa que dio paso a otras varias presencias en una de las metas legendarias del automovilismo mundial.